Las naciones tropicales insulares del Pacífico más vulnerables a la subida del nivel del mar por el calentamiento global deberán afrontar además más cambios interanuales extremos en el océano.
El culpable es un cambio de comportamiento proyectado del fenómeno de El Niño y su característica respuesta en el viento del Pacífico, de acuerdo con los últimos experimentos de modelado por ordenador y análisis de mareógrafos de los científicos Mateo Widlansky y Axel Timmermann, en el Centro Internacional de Investigación del Pacífico, de la Universidad de Hawai en Manoa.
Durante El Niño, el agua caliente y los altos niveles del mar se desplazan hacia el este, dejando a su paso niveles del mar más bajos en el Pacífico occidental.
Los científicos ya han demostrado que este movimiento de sube y baja de este a oeste es a menudo seguido, entre seis meses a un año más tarde, por un sube y baja del nivel del mar de norte a sur similar, con niveles del mar hasta 30 centímetros menores en el hemisferio sur. Estos movimientos del nivel del mar exponen a los ecosistemas marinos poco profundos en las islas del Pacífico Sur.
El equipo de científicos se preguntó cómo el futuro calentamiento por el efecto invernadero afectará al balanceo del nivel del mar de El Niño. A finales de este siglo, sus experimentos muestran que los efectos de intensificación de eventos fuertes de El Niño y La Niña es probable que dupliquen la frecuencia de sucesos extremos del nivel del mar, sobre todo en el Pacífico suroccidental tropical.