Las autoridades de Francia han cifrado en tres el número de desaparecidos a causa de las inundaciones provocadas por las intensas lluvias, las peores en más de un siglo, en la región de Aude (suroeste).
El prefecto de Aude ha revisado a la baja el balance de víctimas mortales, que ha cifrado en once, y ha señalado que otras ocho personas han resultado heridas, según ha recogido el diario local 'Ouest France'.
Por su parte, la agencia meteorológica del país europeo, Méteo France, ha mantenido la alerta roja en Aude debido a la amenaza de inundaciones.
Entre las zonas más golpeadas por las lluvias y las inundaciones figuran las localidades de Conques-sur-Orbiel y Villardonnel, donde el nivel del agua ha alcanzado las ventanas de la primera planta de algunas viviendas. La región de Aude es mundialmente conocida por albergar la ciudad medieval de Carcasona.
Las inundaciones han sido repentinas. En un lapso de cinco horas, "cayeron entre 160 y 180 milímetros de agua en la zona de Carcasona", la capital departamental, indicó el lunes el prefecto, subrayando que esto equivale a cinco meses de precipitaciones.
Las escuelas en el departamento de Aude permanecerán cerradas y se ha recomendado a los residentes que permanezcan en sus casas.
Las lluvias torrenciales no son un fenómeno extraño en Francia en esta época del año, pero los meteorólogos han indicado que el agua del mar excepcionalmente cálida en la cosa mediterránea del sur el país podría estarlas intensificando. Francia ha experimentado el que es hasta ahora el año más cálido desde 1900, según Méteo France.