Al menos 85 localidades han sufrido inundaciones en Birmania tras la rotura de una presa que ha bloqueado una importante carretera y obligado a más de 63.000 personas a abandonar sus hogares, según ha informado este jueves un periódico estatal.
El desastre muestra las preocupaciones de seguridad sobre las presas en el sudeste asiático después del colapso de otra presa hidroeléctrica en Laos en julio, que obligó a que miles de personas fueran evacuadas y causó la muerte de al menos 27.
El subdirector general del Departamento de Gestión de Irrigación y Uso del Agua, Zaw Lwin Tun, ha informado al diario 'Global New Light' de que las inundaciones en el lugar de la presa se han reducido.
Días antes, las autoridades dieron el visto bueno a la presa, a pesar de las preocupaciones de los residentes sobre el derrame, según los medios estatales.
La rotura de la presa ha bloqueado parte de la autovía que une Rangún, Mandalay y Naipidó, la capital. Las imágenes publicadas en Facebook muestran a soldados birmanos evacuando a personas en lanchas improvisadas de bambú y llevando a niños y ancianos en medio de las aguas, a la altura de la rodilla.