La colaboración entre gestores e investigadores es un elemento clave para la mejora de la comprensión y la gestión de los espacios naturales y, en especial, de los ríos temporales debido a su falta de reconocimiento por parte de la sociedad. La relación entre el proyecto TRivers y el Parc Natural dels Ports es un ejemplo de esta interacción, tal como se mostró en la Jornada de divulgación del Parc Natural dels Ports que tuvo lugar el pasado 15 de noviembre en el Campus de las Terres de l'Ebre de la Universitat Rovira i Virgili. En esta jornada, celebrada en el marco del 15 aniversario del parque natural, la investigadora del departamento de biología evolutiva de la Universidad de Barcelona y miembro de Life TRivers Núria Cid presentó resultados del proyecto, en el que hay ríos de la zona de Els Ports.
Debido a su buen estado de conservación, las cabeceras de los ríos Canaletes y Algars, ambos incluidos en el Parc Natural dels Ports, y el río Cérvol, éste dentro del Parc Natural de la Tinença de Benifassà, forman parte de los lugares de estudio del proyecto, ya que permiten comparar las comunidades biológicas de ríos permanentes con las de los temporales sin la influencia de los impactos humanos y se pueden utilizar como referencia.
Desde abril hasta septiembre de 2015, los investigadores de TRivers han realizado en estos ríos campañas de muestreo con resultados desiguales: "Hemos observado que tanto el río Canaletes como el Algars no se han desconectado en la cabecera, pero sí aguas abajo. Por otra parte, el río Cérvol, lleno de agua en primavera, estaba totalmente seco en el mes de agosto", explicó la investigadora.
Fruto de esta investigación, Núria Cid resaltó la importancia de adaptar el calendario y el lugar de muestreo a los ríos temporales naturales y, por tanto, muestrear con los métodos actuales sólo en el período en el que el río tenga una probabilidad más elevada de que haya caudal y cuando todos los hábitats estén conectados. Esto se puede saber utilizando el software TREHS, desarrollado en el marco del proyecto, que permite la entrada de diversas fuentes de información, como datos de caudales reales o simulados, entrevistas a la población y fotografías aéreas. Respecto a los ríos de carácter más efímero y en los que sólo baja agua cuando llueve, la investigadora planteó la posibilidad de desarrollar métodos alternativos.
Detectar el impacto de las extracciones de agua
En el estudio también se incluyeron tramos de ríos permanentes que se han convertido en temporales debido a impactos hidrológicos, principalmente por el hecho de tener muchos puntos de extracción de agua a lo largo de su recorrido. Estos ríos son la parte baja del río Matarraña y del río Sénia. Por ejemplo, en la parte baja del Matarraña, sólo quedan balsas aisladas durante los meses de verano, afectando negativamente a las poblaciones de muchos organismos acuáticos como los peces autóctonos, muchos de ellos amenazados. Según los resultados que se presentaron en la jornada, en estos ríos la calidad biológica disminuye principalmente debido al impacto hidrológico. Por tanto, es de gran relevancia detectar los impactos hidrológicos actuales y poder establecer caudales ecológicos que permitan mantener la calidad biológica de los ríos de acuerdo con lo que dicta la Directiva Marco del Agua y conservar la elevada biodiversidad que contienen los ríos mediterráneos.
Durante la jornada, también se presentaron otros trabajos como, por ejemplo, el seguimiento de las poblaciones de libélulas del Parc Natural dels Ports de la mano de Pere Luque, biólogo del Museu de les Terres de l'Ebre, o la investigación sobre si la libélula Macromia splendens, especie protegida que necesita ríos permanentes para poder completar su ciclo biológico, podría verse afectada por la posible reducción de caudales de los ríos de Els Ports, ya sea debido a las extracciones de agua para uso humano o debido a los efectos del cambio climático.
Finalmente, Núria Cid recalcó durante su charla que todo este conocimiento sobre los ríos temporales será cada vez más importante ya que "con el cambio climático, los ríos en zonas de clima mediterráneo recibirán cada vez menos agua y, por tanto, los ríos temporales serán más frecuentes".