La dirección y los responsables técnicos del Área de Abastecimiento de la Agencia Catalana del Agua (ACA) han visitado las instalaciones de la Estación de Regeneración de Agua (ERA) ubicada en la planta depuradora el Prat de Llobregat (Barcelona) para comprobar su operatividad a fin de que esté preparada para ser activada en caso de que se entre en sequía los próximos meses.
El director y el gerente de la ACA durante la visita a la planta de regeneración
El director de la ACA, Jordi Agustí, acompañado del gerente, Luis Ridao, y del director del Área de Abastecimiento, Jordi Molist, han visitado las instalaciones de regeneración del Prat y se han reunido con los responsables del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) para analizar el funcionamiento y operatividad de la planta que tiene una capacidad para regenerar hasta 3,5 m 3 de agua por segundo.
Los embalses de las cuencas internas se encuentran actualmente alrededor del 55% de media
Esta es una de las instalaciones clave que se construyeron durante la última sequía 2007-2008 y que permitiría aportar recursos adicionales para incrementar la garantía de agua a través de la reutilización, bien sea para riego, para detener la intrusión salina el delta del Llobregat a través de los 15 pozos de inyección de agua regenerada construidos por la ACA o para aportar caudal al río, aguas arriba de Molins de Rei, en caso de sequía mediante la tubería de 15 kilómetros que se construyó para favorecer la reutilización indirecta.
Jordi Agustí remarcó "la importancia de ir coordinados y de colaborar como ya lo estamos haciendo con el resto de administraciones, usuarios y operadores del agua para dar respuesta ágil y eficaz a las necesidades que se puedan producir los próximas meses si continúa el descenso de las reservas en caso de ausencia de lluvias".
Los embalses de las cuencas internas se encuentran actualmente alrededor del 55% de media, si bien las demandas están garantizadas para los próximos meses. Sin embargo la sequía pluviométrica que hace meses que vive Cataluña y las altas temperaturas que se han producido en verano junto con la extrema sequedad de la cubierta del suelo y vegetal han provocado que las primeras lluvias caídas en septiembre no hayan aportado caudales ni en las cabeceras de los ríos ni los embalses.
La ACA a pesar de estar en una situación de normalidad a la espera de posibles lluvias en otoño, ha comenzado a trabajar en la aplicación de diversas medidas de prevención, gestión y contención del gasto de agua para optimizar al máximo las reservas disponibles.
Equilibrar el sistema
Evolución trianual de los embalses del Ter-Llobregat.
Desde hace días se aplican las medidas preventivas, empezando por la reducción de las extracciones de agua para el riego en la Muga y el Ter. En segundo lugar, dado que la cuenca del Llobregat tiene unos volúmenes más altos, actualmente se capta más agua de los embalses del Llobregat para abastecer el sistema Ter-Llobregat (ATL) y reequilibrar todo el sistema.
Otra de las medidas emprendidas es el incremento de producción del agua desalinizada, a través de la planta del Llobregat. Actualmente su funcionamiento es del 30%, mientras que de manera habitual y cuando los embalses están llenos su régimen de producción se sitúa en el mínimo técnico del 10%. Esta misma semana se ha realizado una visita por parte de la Dirección de la ACA en las instalaciones de la desalinizadora.
Desde la ACA también se está revisando el estado de los pozos recuperados durante la sequía de 2007 y 2008 para poder activar en caso de necesidad y se está hablando con las diferentes empresas gestoras del suministro de agua domiciliario para fomentar un consumo responsable.
Agustín y Ridao durante la reunión en la planta desalinizadora del Llobregat.
Antelación de ocho meses
El Plan Especial de Sequía, actuamente en trámite de información pública, es la herramienta de gestión que permitirá combatir de manera más eficiente y con antelación la sequía. El Plan establece los umbrales de entrada y salida de la sequía para cada unidad de gestión (18 en las cuencas internas) así como las medidas preventivas (como las que ya se están aplicando) para hacer frente a la sequía con una antelación de más de ocho meses para garantizar el abastecimiento a la población y evitar que la situación pueda llegar a ser crítica y deba declararse el escenario de emergencia.
El PES es el instrumento de planificación que pretende dar continuidad ágil y eficiente desde la gestión ordinaria o de normalidad hidrológica hacia la gestión de situaciones de sequía y los episodios más críticos de falta de disponibilidad de recurso. El PES da cumplimiento a la normativa vigente, que establece que todos los organismos de cuenca deben elaborar un plan para enfrentarse a las situaciones de sequía.
