Durante los próximos diez meses, Astosam, en colaboración con la Cetaqua Andalucía y la Universidad de Málaga, trabajarán para garantizar la calidad de las aguas de baño en el litoral de Torremolinos, identificando la procedencia de los posibles vertidos que aparezcan en el agua de sus playas. Esta cooperación se debe a la puesta en marcha, el pasado 9 de junio, del proyecto de investigación SEGVERT, liderado por la empresa Astosam.
El objetivo del proyecto es detectar la procedencia de manchas en el agua usando técnicas de visión artificial que permitirán analizar en tiempo real imágenes del mar para detectar posibles vertidos. El servidor encargado del análisis de las imágenes determinará la ubicación de la mancha y realizará un seguimiento de la misma para permitir trazar la trayectoria seguida e inferir su procedencia.
Astosam mantiene desde hace años monitorizados los aliviaderos de su red de saneamiento garantizando de este modo que las salidas de sus infraestructuras de saneamiento están libres de material contaminante. Sin embargo, en ocasiones se ha detectado la presencia de manchas en el agua que podrían afectar a la imagen turística de Torremolinos y al bienestar de sus ciudadanos. Con este proyecto, Astosam sigue apostando por la innovación aplicando los últimos avances tecnológicos para continuar con la mejora continua de sus servicios y la protección del medioambiente en la ciudad de Torremolinos.