La zona afectada por el incendio de Òdena (Barcelona), que sigue activo y ya ha calcinado 1.235 hectáreas, es una de las más afectadas por la sequía por la falta de precipitaciones de los últimos seis meses.
El Índice de Precipitación Estándar (IPE), uno de los indicadores de sequía pluviométrica más ampliamente utilizado y permite evaluar el déficit o exceso de precipitación, indica que la zona tiene "sequía extrema", ha informado la Conselleria de Territorio y Sostenibilidad.
La estación meteorológica automática de Sant Salvador de Guardiola solo había acumulado desde el 1 de enero hasta este domingo 124,8 mililitros, cuando la mediana climática del mismo periodo es de 316,6 mililitros.