La Generalitat estudiará "las medidas que haga falta" respecto a presuntas irregularidades de facturación en la concesión de Aigües Ter Llobregat (ATLL) incluidas en un informe de la Oficina Antifraude de Catalunya (OAC).
Así lo ha anunciado la consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Neus Munté, en la rueda de prensa posterior al Consell Executiu, en la que ha explicado que los hechos "ya habían sido detectados" por la Agencia Catalana del Agua (ACA) con una auditoría y puesto en conocimiento la Agencia Tributaria en 2015.
Ha expuesto que se trata de operaciones societarias que se produjeron sin conocimiento ni autorización de la ACA, pero ha destacado que por ello no se ha visto afectado el servicio de abastecimiento de agua en el área de Barcelona ni ha habido "ninguna repercusión" en el precio de la tarifa.
"Hace falta dejar claro que la gestión, prestación y calidad del servicio en ningún caso se han visto afectados", ha asegurado, y ha añadido que a partir de la comunicación con la OAC estudiarán las medidas que deban tomar a partir de este momento.
Preguntada por si la Generalitat tendrá más presencia en las reuniones del consejo de administración de ATLL Concesionaria después de que la OAC haya considerado que se encuentra infrarrepresentada, Munté ha sostenido: "A partir de la recomendación de Antifraude se estudiará cuál es la presencia que deba ser adoptada".