El coportavoz de Compromís en las comarcas de Castelló, Carles Mulet, ha afirmado este jueves que si los 110 millones de euros destinados a dos desaladoras se hubieran invertido en un plan para abastecer al interior de la provincia de Castellón, "hoy ningún pueblo tendría problemas de agua".
En un comunicado, ha lamentado que, como cada verano y en especial en los que vienen precedidos de falta de lluvias, pueblos del interior sufran "serios problemas de abastecimiento de agua" para consumo humano tras haber "malgastado 110 millones de euros invertidos hacer dos desaladoras ya acabadas y que no funcionan por la falta de demanda".
Al respecto, Mulet mantiene que esa situación demuestra "cuáles han sido las prioridades del PSOE y el PP cuando han gobernado".
A su juicio, "no es aceptable" que las prioridades de los gobiernos de Zapatero en materia hídrica en Castellón fueran "construir con fondos europeos y estatales dos desaladoras que tenían como objetivo legalizar unas actuaciones urbanísticas bárbaras que si no garantizaban este suministro de agua desalinizada no podían tramitarse".
Mulet ha reprobado que, con las obras acabadas, "las urbanizaciones y nuevos residentes ni están ni se les espera y existe el lío de ver cómo se devuelve el dinero por parte de los ayuntamientos afectados, mientras hay pueblos del interior que continúan con los problemas de siempre para poder tener un suministro regular de agua, como Vilafranca".
El portavoz ecosocialista ha remarcado que los problemas hídricos del interior "se habrían suavizado y mucho", como mínimo, "si los 110 millones de euros de las desaladoras se hubieran invertido en un plan concreto para mejorar canalizaciones, aprovechamientos de aguas superficiales y subterráneas, nuevos pozos, reutilización integral de aguas depuradas, medidas de ahorro y eficiencia y racionalización".
Mulet también ha subrayado que mientras el PSOE con "seguía adelante con estas actuaciones, el PP a nivel autonómico, provincial y local era cómplice de estas actuaciones, votando a favor de los proyectos, cediendo gratuitamente el suelo y aprobando los proyectos urbanísticos que necesitaban supuestamente aquella agua desalinizada".
Así, ha culpado a los gobernantes de ambos partidos de que localidades del interior de Castellón, en especial de las comarcas dels Ports, Maestrat o l'Alcalatén, "se tengan que abastecerse con cubas de agua, secar pozos y depósitos y estudiar restricciones".