Un mal uso del inodoro puede provocar consecuencias en las tuberías y atascos visibles e inmediatos en nuestro retrete, pero este impacto va mucho más allá, estos residuos acaban en ríos y mares, degradando de este modo el medio ambiente y poniendo en peligro el ecosistema de ríos y mares.
¿Sabes qué diez cosas nunca se deberían tirar al inodoro?
- Las toallitas húmedas, se han convertido en el peor enemigo de los sistemas de alcantarillado de las ciudades porque, al no deshacerse crean atascos gigantes.
- En Europa, la asociación que agrupa a las empresas de abastecimiento y saneamiento de 27 países sostiene que las toallitas generan un gasto de entre 500 y 1000 millones de euros cada año, incluyendo la eliminación de residuos, según un informe elaborado en 2015.
- Los tampones y compresas: Con los tampones sucede lo mismo que con las toallitas, no se deshacen y atascan nuestras las tuberías. Pasa lo mismo con los bastoncillos para las orejas, los algodones desmaquillantes y, por supuesto, los pañales.
- El aceite: Un solo litro de aceite contamina hasta mil litros de agua. Además, a las depuradoras les cuesta mucho separarlo, con que lo que termina directamente en el medio ambiente.
- Preservativos: Los preservativos están diseñados precisamente para no romperse, por lo que suelen aparecer flotando con frecuencia en las alcantarillas de algunas ciudades.
- Las colillas: La colilla se quedará flotando en el váter hasta tres o cuatro descargas de la cisterna. Tampoco se degrada con facilidad y arroja todos los químicos que lleva un cigarrillo a la red de aguas.
- Lejía y amoniaco: Estos productos que a menudo utilizamos en la limpieza de nuestra casa no son fáciles de desechar. Son altamente contaminantes y pueden oxidar la materia orgánica.
- Pinturas y disolventes: Los productos químicos con los que están hechos son muy contaminantes. En este caso siempre es preciso acudir a un punto limpio.
- Medicamentos: Los medicamentos también pueden resultar muy nocivos. Especialmente si terminan en los sistemas de irrigación o en los depósitos de agua potable.
- Las tiritas y el hilo dental: Puede que nunca te lo hayas planteado, pero estos elementos tampoco son biodegradables, con lo que tirarlos al inodoro no es una buena opción.
- Basura: Aunque se trata de residuos orgánicos siempre es preferible utilizar el cubo de basura de toda la vida a arrojar los restos en el inodoro.