En su intervención, ha destacado que todas las decisiones se han tomado pensando en los agricultores de varias generaciones para que no tengan que pagar unos costes excesivamente altos, por ello, se transformarán las 15.000 hectáreas que sean más rentables porque una parte deben pagarla los propios agricultores.
Gil Soto ha explicado los criterios exclusivamente técnicos que se han seguido para esta primera delimitación sobre la que ahora se trabajará, aseverando que en ningún momento se han seguido criterios políticos como se ha asegurado en ciertos foros recientemente.
Igualmente, ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los agricultores, puesto que se está en fase de anteproyecto y estudio de detalle pueblo por pueblo, por lo que la delimitación de la zona regable aún no es definitiva y se ha comprometido a estudiar todas las alegaciones que se planteen.
Inversión compartida
El titular de Desarrollo Rural ha detallado que el coste de la inversión y los futuros costes de mantenimiento han sido determinantes para delimitar la zona regable, de manera que el coste de la obra debe rondar, como mucho, los 6.000 euros por hectárea, de los que la Administración regional intentará sufragar en torno al 75 por ciento, y que los costes de explotación estuviesen en el entorno de los 200 euros por hectárea.
Ha puntualizado también que se trata de un regadío solidario, es decir, que estén donde estén, los regantes pagarán lo mismo y que no se ha hecho un reparto por pueblos sino que se ha tenido en cuenta exclusivamente la viabilidad de cada hectárea elegida.
Durante la charla, José Luis Gil Soto ha estado acompañado por los técnicos que han elaborado este anteproyecto, quienes han explicado el procedimiento y los criterios seguidos así como que el próximo 6 de noviembre se conformará la comisión redactora de los estatutos de la futura comunidad de regantes, los cuales deberán aprobarse en el plazo máximo de dos meses, entre otras cuestiones.
El director general ha recordado también que el Consejo de Gobierno ha aprobado recientemente el decreto por el que se declara de Interés General para la Comunidad Autónoma el proyecto de regadíos de Tierra de Barros, un paso imprescindible para que se puedan iniciar los trámites de expropiaciones, entre otros.
Desde 2012 han sido numerosas las charlas informativas multitudinarias que ha ofrecido el director general en diversos municipios de Tierra de Barros y a algunos incluso ha ido varias veces como Villafranca, Villalba o Aceuchal, a los cuales se suma el encuentro con agricultores de Alange la semana pasada.