El Ministerio de Defensa ruso ha criticado este sábado la "destrucción deliberada" de la infraestructura de la ciudad siria de Raqqa, capital 'de facto' del Estado Islámico en Siria y ha puesto como ejemplo el bombardeo de los acuíferos.
Así, un portavoz del Ministerio ha denunciado "la destrucción deliberada de todas las fuentes naturales del suministro de AGUA en Al Raqqa", un "ejemplo destacados de planificación incompetente de esta operación militar".
Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una milicia kurdo-árabe apoyada por Estados Unidos, está a punto de hacerse con el control de Raqqa tras semanas de asedio a los milicianos del Estado Islámico. La intervención de Estados Unidos al frente de una coalición de 73 países no cuenta con la autorización del Gobierno sirio.