Al menos doce personas han muerto en el estado norteamericano de Texas, entre ellas cinco militares, como consecuencia de las lluvias torrenciales que han caído en las últimas semanas y que incluso han obligado a evacuar tres prisiones, según un nuevo balance confirmado este viernes por las autoridades locales.
El incidente más trágico tuvo lugar el jueves, cuando un vehículo con más de una decena de personas a bordo volcó al pasar un arroyo en Fort Hood, sede de una importante base militar. Sobrevivieron tres militares, mientras que otros cinco perdieron la vida y los equipos de rescate buscan a cuatro desaparecidos.
"Esta tragedia trasciende Fort Hood y apreciamos los numerosos apoyos llegados de todo el país", ha agradecido un portavoz de las Fuerzas Armadas, John Uberti, en declaraciones a los periodistas. Las autoridades no han aclarado las razones por las que el vehículo intentaba cruzar el arroyo.
El Departamento de Justicia Penal de Texas procedió el viernes 3 a la evacuación de unos 1.700 internos de un centro penitenciario de Rosharon, a unos 30 kilómetros de Houston, debido a la crecida del Brazos. Este mismo río ya había obligado a trasladar la semana pasada a otros 2.600 reclusos de dos instalaciones.
El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido alertas por posibles inundaciones en grandes zonas de Texas y de Luisiana, entre ellas las ciudades de Houston y Nueva Orleans.
Más de 150 vuelos habían sido cancelados hasta el pasado viernes a las 13.00 (hora local) en los aeropuertos de Dallas y Houston, según el recuento del portal 'FlightAware'.
