Más de 50 personas han fallecido como consecuencia de las fuertes lluvias caídas durante los últimos días en las provincias sudafricanas de KwaZulu-Natal y Cabo Oriental, situada en el este y el sur del país y escenario de inundaciones y corrimientos de tierra.
La mayoría de las víctimas corresponden a KwaZulu-Natal, donde aún está previsto que siga el temporal antes de amainar el jueves, según la cadena de televisión pública SABC. El presidente, Cyril Ramaphosa, ha acortado su asistencia a la cumbre de la Unión Africana en Egipto para volver a Sudáfrica.
El mandatario ha expresado en Twitter su apoyo a los afectados y ha prometido brindar refugio a las "más de 1.000 personas" que han tenido que abandonar sus hogares. "Insto a los que viven en las zonas afectadas a tomar precauciones", ha afirmado.
Ramaphosa, que ha visitado algunas de las áreas afectadas, ha aplaudido la "rápida respuesta" de los servicios de emergencia y ha subrayado que la movilización de recursos públicos ha permitido "salvar vidas". Fuentes de KwaZulu-Natal citadas por la agencia Reuters han afirmado que se busca a posibles desaparecidos entre los escombros de los inmuebles destruidos.