El concejal de Deportes del Ayuntamiento de Barcelona, David Escudé, ha considerado que "pueden ponerse encima de la mesa diferentes alternativas al cierre de todas las duchas" de los gimnasios, medida a la que se puede llegar en la segunda fase de emergencia por la sequía.
En una entrevista de Betevé recogida por Europa Press, ha dicho que está "muy preocupado" por la afectación que las restricciones pueden tener en el sector deportivo.
"Es más grave que incluso lo que vivimos durante la pandemia", y ha añadido que el Ayuntamiento trabaja para buscar alternativas con la Generalitat para evitar el cierre de las duchas en los gimnasios, y asegura que pueden haber otras soluciones técnicas.
Un 25% menos de duchas disponibles
En la primera fase de emergencia por sequía, el Ayuntamiento ha reducido el 25% de duchas disponibles en todos los vestuarios de las instalaciones deportivas municipales.
Se prohíbe también el uso de duchas a los equipos federados después de los entrenamientos (sí se podrá después de los partidos), se reduce el mínimo indispensable el filtraje del agua en las piscinas y se monitoriza los consumos de agua de cada instalación.
Por otra parte, de forma progresiva, se sustituirán los grifos lavamanos que no tengan pulsador temporizado, se instalarán aireadores en las duchas y grifos que no dispongan y se reforzará la información para todos los usuarios y usuarias de las instalaciones.
