El Parlamento Europeo ha adoptado este martes su posición negociadora sobre la nueva legislación que actualizará las directivas sobre calidad del agua y los estándares de calidad medioambiental, incluyendo una lista actualizada de contaminantes de las aguas superficiales y subterráneas que deben vigilarse y controlarse para proteger las masas de agua dulce de la UE.
Los eurodiputados piden que la lista se vaya revisando regularmente para seguir el ritmo de las nuevas evidencias científicas y nuevos productos químicos, así como añadir a la lista agentes químicos perfluoroalquilados y polifluoroalquilados y sustancias, como los microplásticos y los microorganismos resistentes a los antimicrobianos.
El informe de la Eurocámara reclama también estándares más estrictos para pesticidas como glifosato y atrazina. Como medida, se sugiere que los fabricantes que vendan productos que contengan sustancias químicas contaminantes ayuden a financiar los costes de seguimiento, un coste que ahora asumen solo los Estados miembros.
“La mejora de la protección de las aguas de la UE es extremadamente importante, especialmente en el contexto de los efectos cada vez más acuciantes del cambio climático -combinado con la contaminación industrial y agrícola- sobre nuestros recursos de agua dulce”, ha valorado el ponente, el socialista esloveno, Milan Brglez.
