La Xunta de Galicia ha destacado que la inversión en actuaciones de saneamiento de aguas en ríos y rías de la comunidad superó los 1.100 millones de euros desde el año 2009, según ha expuesto la directora de Augas de Galicia, Teresa Gutiérrez, en su comparecencia este miércoles en la Cámara autonómica para responder a una pregunta del Grupo Socialista en la Comisión 2ª.
En este sentido, la responsable del ente autonómico de gestión de los recursos hídricos ha señalado que en los últimos once años se llevaron a cabo 350 actuaciones de saneamiento en 165 ayuntamientos, así como otras 300 obras en materia de abastecimiento que llegaron a 186 municipios.
Asimismo, al amparo de la Administración autonómica, se construyeron 45 estaciones depuradoras que supusieron una inversión de 1,7 millones de euros. Entre las actuaciones ha destacado las inversiones en la ría do Burgo, la ría de Arousa y en la construcción de la EDAR de Ribeira ejecutada en colaboración con el Estado.
Frente a esto, el diputado socialista Pablo Arangüena ha recordado la multa impuesta por la Unión Europea a los ayuntamientos de Santiago, Vigo y Ribeira por incumplimientos en normativa de saneamiento, una "situación recurrente", según el parlamentario, en varios puntos de Galicia sin que la Xunta "haga nada" al respecto.
Así, ha puesto como ejemplo "paradigmático" la situación del río Furelos, en Melide (A Coruña), municipio donde ejerció como alcaldesa la actual responsable de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez. En dicho río, ha continuado Arangüena, fallecieron "10.000 truchas" en julio de 2019 por vertidos en las aguas del río.
En este sentido, ha instado a la Xunta a dejar "de echar balones fuera" y de "ocultar" la realidad detrás de "inversiones y cifras" porque "la situación de las aguas en Galicia es mala y no tiende a mejorar", como demuestra que existan "un 21,5% más de vertidos que hace un lustro"
En el turno de cierre, la directora de Augas ha respondido que esto último se debe a que el sistema de Galicia es "reconocido" a nivel nacional por su capacidad para detectar vertidos, que pueden ser denunciados por particulares a través del 112.