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Las inundaciones en Sudán del Sur dejan comunidades completamente anegadas y 900.000 afectados

  • inundaciones Sudán Sur dejan comunidades completamente anegadas y 900.000 afectados
    Sudán del Sur. (Imagen: Médicos Sin Fronteras)

Más de 900.000 personas, incluidos desplazados y refugiados, se han visto afectadas por las inundaciones anormalmente graves que se están registrando este año en la temporada de lluvias en Sudán del Sur y que han dejado comunidades enteras completamente anegadas, según la ONU, que advierte que las precipitaciones continuarán durante cuatro o seis semanas más, con el consiguiente riesgo para la población.

"Estoy gravemente preocupado por las consecuencias humanitarias de las inundaciones", ha reconocido el coordinador humanitario de la ONU en Sudán del Sur, Alain Noudéhou, que ha asegurado que Naciones Unidas ya está respondiendo en coordinación con el Gobierno sursudanés con el fin de "salvar vidas y mantener la dignidad de las personas".

Las intensas lluvias han golpeado zonas en las que ya había fuertes necesidades humanitarias. Más de 3 millones de personas necesitaban asistencia en los 32 condados inundados en los estados de Jonglei, Alto Nilo, Warrap, Equatoria Oriental, Bahr el Ghazal del Norte, Unidad y Lagos ya antes de las inundaciones y en el 60 por ciento de ellos hay niveles alarmantes de desnutrición aguda.

Las lluvias han anegado comunidades enteras, llenando de agua instalaciones médicas y centros de nutrición, algunos de los cuales también han quedado inoperativos para albergar a los desplazados. Como resultado de las inundaciones, también se ha visto afectado el acceso a mercados y servicios básicos, mientras que las enfermedades se están propagando debido al agua contaminada y el acceso a higiene y saneamiento es limitado, ha explicado la ONU en un comunicado.

Noudéhou ha resaltado que afortunadamente la ONU y sus socios humanitarios ya estaban trabajando en estas zonas antes de las inundaciones y ahora incrementarán su asistencia para "ayudar a la gente rápidamente, especialmente una vez que remita el agua y el acceso mejore".

Hacen falta 35 millones de dólares

Para poder ofrecer esta respuesta, ha precisado, hacen falta 35 millones de dólares con los que atender prioridades inmediatas como la potabilización de agua, coberturas de plástico, mosquiteras y medicamentos para enfermedades como la malaria o la diarrea, además de repartir asistencia alimentaria.

La ONU ha dejado claro que esta crisis no acabará una vez que remitan las aguas puesto que se prevén daños considerables en las cosechas, las tierras y el ganado, lo que lastrará los medios de vida de la población en los meses venideros.

"Hay que hacer más a largo plazo para reconstruir los medios de vida de la población y reforzar su resiliencia frente a futuros desastres", ha defendido el coordinador de la ONU, subrayando que "esto requiere acción colectiva y sostenida del Gobierno, los donantes y los actores humanitarios y de desarrollo".

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