La tierra sólida en la base de la capa de hielo de la Antártida está cambiando de forma sorprendentemente rápida, con un levantamiento por deshielo en décadas en lugar de en miles de años.
Un equipo liderado por el Australian Antarctic Program (AAP) desarrolló --con este hallazgo como resultado-- un modelo 3D del interior de la Tierra utilizando mediciones de campo geofísicas de la Red Antártica (ANET) del proyecto Polar Earth Observing Network (POLENET).
Según un nuevo estudio, si los humanos pueden reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y se frena el calentamiento global, estos cambios ascendentes en la tierra sólida podrían reducir la contribución de la Antártida al aumento del nivel del mar en aproximadamente un 40%, lo que reforzaría significativamente los mejores escenarios posibles para el aumento del nivel global del mar, según un nuevo estudio publicado en Science Advances.
En este escenario de bajas emisiones, el levantamiento de la tierra ralentiza el flujo de hielo de la tierra al océano, lo que permite preservar una mayor parte de la capa de hielo, informó el AAP en un comunicado.
Por el contrario, si los humanos no pueden reducir las emisiones de carbono a tiempo, el retroceso del hielo superará el levantamiento, alejando el agua del océano de la Antártida y amplificando el aumento del nivel del mar. Estos eventos podrían empeorar significativamente los modelos más nefastos de aumento del nivel del mar proyectado a lo largo de las costas pobladas.
La misión de la AAP se centró en el estudio de las cambiantes regiones polares mediante la recopilación de datos GPS y sísmicos de una serie de sistemas autónomos en toda la Antártida.
A continuación, los investigadores realizaron una serie de simulaciones para capturar muchas posibles evoluciones de la capa de hielo de la Antártida y el alcance del aumento global del nivel del mar que la Tierra puede experimentar hasta el año 2500, según esos parámetros.