El número de muertes a causa de las fuertes lluvias registradas en el sureste de Brasil durante los últimos días ha aumentado a 64, según el último balance difundido por la agencia de Defensa Civil del país.
En el estado de Minas Gerais han fallecido por el momento 53 personas, 13 de ellas en la capital regional, Belo Horizonte. Hasta el momento más de 60 personas han resultado heridas y dos continúan desaparecidas: una en Luisburgo y otra en Conselheiro Lafaiete.
El gobernador de Minas Gerais, Romeu Zema, ha declarado la situación de emergencia en 101 de los 853 municipios del estado brasileño, incluida la capital, y ha anunciado tres días de luto oficial por las víctimas mortales de unas "lluvias históricas".
"Con eso, podremos movilizar a las agencias estatales en las acciones de respuesta y rehabilitación", ha aseverado Zema en un mensaje difundido a través de su página de Facebook.
Dicha medida, que ya ha sido reconocida por el Gobierno federal, estará en vigor durante un periodo de 180 días y permitirá acciones más rápidas para asistir a la población afectada.
Las autoridades del país han informado, además, de que otras nueve personas han muerto en el estado vecino de Espirito Santo --donde hay 13.000 desalojados y 1.312 damnificados--, y dos en el de Río de Janeiro.
Asimismo, Defensa Civil estima que más de 32.000 personas se han visto obligadas a desplazarse debido a las inundaciones y que otras 4.000 se encuentran sin hogar en Minas Gerais, la región más afectada.
Por su parte, la Secretaría Nacional de Protección y Defensa Civil (SEDEC) ha comunicado que se ha aprobado una dotación de más de 90 millones de reales (19 millones y medio de euros) para las labores de rescate y reconstrucción de las zonas afectadas.
El servicio meteorológico brasileño Inmet ha alertado de que se trata de las precipitaciones más fuertes registradas durante los últimos 110 años en Belo Horizonte. El viernes cayeron 171,8 litros por metro cuadrado en tan solo 24 horas. Se trata del máximo histórico desde que comenzaron los registros en 1910.
Las autoridades estiman que las lluvias comenzarán a debilitarse, aunque han advertido del riesgo de nuevos deslaves en Belo Horizonte, Sabará, Río Acima, Brumadinho, Contagem, Nova Lima, Betim, Ribeirao das Neves e Ibirité.
