El Pleno del Ayuntamiento de Santander ha aprobado, con la unanimidad de sus tres grupos, PP, PSOE y PRC, una moción por la que esta administración se opone al uso de la técnica de la fractura hidráulica o 'fracking' tanto en el municipio como en el conjunto de Cantabria.
Asimismo, y según el texto consensuado por los tres partidos políticos, el Consistorio apoyará cualquier iniciativa que se lleve a cabo desde el Gobierno o el Parlamento regional contra el recurso de inconstitucionalidad presentado por el Ejecutivo central a la Ley autonómica que prohíbe el fracking en la Comunidad, recurso que tachan de "intrusismo" en la soberanía de la Cámara cántabra.
Los 'populares', socialistas y regionalistas de la capital rechazan que el Estado intente llevar a cabo en Cantabria una política energética que "claramente apuesta por la técnica del fracking, sacrificando los recursos naturales de nuestra Comunidad Autónoma y la salud de los ciudadanos".
Y es que, a su juicio, y como reza en el texto de la moción, el uso del fracking tiene "un grave riesgo de contaminación de acuíferos, tanto en el municipio de Santander como en el resto del territorio cántabro, por los fluidos químicos altamente nocivos utilizados para la obtención de gas".
"El riesgo constatado de contaminación de las aguas, tanto superficiales como subterráneas, puede traer consecuencias irreparables para la agricultura y la ganadería de Cantabria, y para su economía local, además de para la salud y bienestar de los ciudadanos", añaden en la moción, que se enviará a la Federación de Municipios de Cantabria (FMC), al Parlamento regional y a los gobiernos autonómicos y central.