Los Sistemas de Agua Potable (SAP) que abastecen a las familias rurales de León y Chinandega enfrentaron su mayor amenaza durante el verano. En algunos casos los niveles de los acuíferos se vieron reducidos, amenazando las fuentes de aguas para el consumo humano y obligando a la población a acudir al pozo más cercano; el que dista a muchos kilómetros.
La cosecha de agua de lluvia, una técnica implementada por los ancestros mayas, es la alternativa que ha retomado el Proyecto GIRH Occidente, financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), para aumentar el nivel del manto acuífero en períodos secos, mediante el uso de pozos de infiltración de agua de lluvia.
Un pozo de infiltración es una excavación sencilla con dimensiones adaptables al terreno (puede ser de 2x4 metros x 1 metro de profundidad), cuya finalidad es captar por escorrentías el agua de lluvia e infiltrarla lentamente, para ayudar a recargar los pozos en las comunidades rurales.
Esta tecnología fue implementada en Nicaragua primeramente por la Empresa Aerobombas de Mecate en las comunidades rurales, “la tecnología es sencilla, adaptable, no necesita infraestructura ni maquinaria pesada. Simplemente hay que tomar en cuenta lo que la naturaleza hace”, dijo Luis Román, director de Aerobombas de Mecate.
La Fundación Ecología y Desarrollo (ECODES) en los últimos años ha implementado esta tecnología en 152 viviendas de 10 comunidades rurales de León, capacitando a los comunitarios para promover buenas prácticas en el buen uso y conservación del agua.
“En mayo iniciaremos la transferencia de esta tecnología a niveles macro, sobre todo en lugares donde incida en las cuencas hidrográficas para recargar pozos y recuperar quebradas cercanas a los SAP”, explicó Alfredo Campos, técnico de ECODES.
Con el proyecto se construirán 15 sistemas de infiltración de agua de lluvia de forma natural a 5 Comités de Agua Potable y Saneamiento (CAPS) del municipio de Achuapa, en colaboración con la Alcaldía municipal, para dar respuestas a la difícil situación que presentan las comunidades con el acceso al agua.
Alvaro Rodríguez, de Amigos de la Tierra España, dijo que están desarrollando acciones con los CAPS para mejorar la gestión integral de los recursos hídricos en 5 municipios de León y Chinandega, “no solo se trata de acceder al agua en cantidad y calidad, sino formar el capital humano de los comités para garantizar la gestión y sostenibilidad de estos sistemas de agua, en alianza con los gobiernos locales”.
“Debemos impulsar acciones con las comunidades para proteger las fuentes de agua, recargar el acuífero y reducir la huella hídrica. Esto permitirá garantizar el agua para todos”, expresó Nienke Swagemakers, representante de ECODES.
Desde el 2016, han formado técnicamente en Agua y Saneamiento a más de 200 personas entre usuarios y miembros de CAPS del occidente y norte de Nicaragua, avalados por el Instituto Nacional Tecnológico (INATEC). Otras 62 personas de El Viejo (Chinandega) y El Sauce (León) se han certificado en el 2018; a finales de mayo se sumarán otros 20 del municipio de Malpaisillo.
El proyecto GIRH Occidente es ejecutado por Amigos de la Tierra España, ECODES y Fundación LIDER, beneficiando a 56 comunidades de los municipios de El Viejo (Chinandega), Malpaisillo, León, Achuapa y El Sauce (León), con la financiación de casi 300 mil euros provenientes de la AECID.