Mejora del abastecimiento de agua potable al Área Metropolitana de Valencia

El Área Metropolitana de Valencia constituye la principal concentración urbana de la Comunidad Valenciana y la tercera más grande de España. Con una población superior a 1,6 millones de habitantes repartidos en 44 municipios, esta área se extiende a lo largo de más de 600 kilómetros cuadrados en torno a la ciudad de Valencia, incluyendo comarcas como l’Horta Nord y l’Horta Sud. Este entorno concentra una intensa actividad residencial, industrial y de servicios, lo que convierte a la gestión del agua en un elemento esencial para el bienestar de la ciudadanía y el desarrollo económico.
En este contexto, el abastecimiento de agua en alta adquiere una importancia estratégica, ya que garantiza el transporte del recurso desde los puntos de captación y potabilización hasta los depósitos municipales que alimentan las redes urbanas de distribución. La Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (EMSHI), en coordinación con Global Omnium, es la responsable de asegurar este suministro en condiciones de calidad, eficiencia y seguridad. La creciente presión demográfica, unida a los desafíos derivados del cambio climático, como episodios de lluvias torrenciales o sequías prolongadas, ha impulsado una serie de inversiones clave para reforzar la resiliencia del sistema y asegurar su capacidad de respuesta ante contingencias.
La modernización de las infraestructuras, la interconexión entre plantas potabilizadoras y la incorporación de tecnologías más sostenibles son algunas de las actuaciones que están transformando el modelo de abastecimiento en alta del Área Metropolitana de Valencia en un referente a nivel nacional.
El Sistema Básico Metropolitano: estructura y funcionamiento
El abastecimiento de agua potable al Área Metropolitana de Valencia se organiza a través de un sistema en alta que capta, trata y transporta el agua desde las fuentes de suministro hasta los depósitos municipales, desde donde se distribuye a los usuarios finales. Este sistema es gestionado por la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (EMSHI), en colaboración con la empresa mixta EMIMET, conformada por Global Omnium y EMSHI. La infraestructura principal del sistema incluye dos estaciones de tratamiento de agua potable (ETAP): La Presa, ubicada en Manises, y El Realón, situada en Picassent.
La infraestructura de abastecimiento en alta es fundamental para garantizar un suministro continuo y eficiente de agua potable
La ETAP de La Presa, en Manises, tiene una capacidad de producción de 3,4 m³/s y se abastece de agua bruta proveniente del río Turia, del canal Júcar-Turia y de pozos propios, lo que le confiere una alta flexibilidad y seguridad en el suministro. Por su parte, la ETAP de El Realón, en Picassent, cuenta con una capacidad de tratamiento de 3,0 m³/s y se abastece exclusivamente del canal Júcar-Turia. Ambas plantas desempeñan un papel crucial en la potabilización del agua que se distribuye al área metropolitana, garantizando que el recurso llegue en condiciones óptimas de calidad y cantidad a la población.
El sistema en alta gestionado por EMSHI y operado por EMIMET abastece a más de 1,6 millones de habitantes distribuidos en 48 municipios del Área Metropolitana de Valencia. La ciudad de Valencia representa aproximadamente la mitad de esta población. La infraestructura de abastecimiento en alta es fundamental para garantizar un suministro continuo y eficiente de agua potable, adaptándose a las necesidades de una región en constante crecimiento demográfico y urbano.
Lecciones de la emergencia
El sistema en alta gestionado por EMSHI y operado por EMIMET abastece a más de 1,6 millones de habitantes distribuidos en 48 municipios
El episodio de lluvias intensas del pasado mes de octubre, asociado a una DANA, dejó registros históricos de precipitación en la Comunidad Valenciana y tuvo repercusiones relevantes sobre distintas infraestructuras hidráulicas. Las plantas potabilizadoras, junto a estaciones depuradoras y otros elementos del sistema, se vieron afectadas por el volumen y la intensidad de las precipitaciones.
Este contexto ha puesto de relieve la importancia de continuar avanzando en la planificación y ejecución de infraestructuras hidráulicas capaces de responder a eventos meteorológicos extremos. La interconexión entre instalaciones estratégicas, la mejora de la capacidad de transporte y tratamiento del agua, y el refuerzo de la red en alta forman parte de una estrategia orientada a mejorar la capacidad de adaptación del sistema metropolitano de abastecimiento frente a escenarios de riesgo.

La respuesta del sector del agua, con la colaboración entre administraciones, operadores y equipos técnicos, permitió restablecer en pocas semanas la práctica totalidad del servicio, reflejando la capacidad operativa y la coordinación ante situaciones de emergencia.
Una red interconectada para una mayor garantía de suministro
El plan de inversiones, con un presupuesto total de 100 millones de euros, busca reforzar la capacidad operativa del sistema metropolitano
La interconexión de las plantas potabilizadoras de La Presa (Manises) y El Realón (Picassent) responde a la necesidad de fortalecer la resiliencia y eficiencia del sistema de abastecimiento de agua potable en el Área Metropolitana de Valencia. Actualmente, cada planta opera de manera independiente, lo que implica que cualquier incidencia en una de ellas podría comprometer el suministro a una parte significativa de la población. Al conectar ambas instalaciones, se garantiza que, ante una eventual falla o mantenimiento en una de las plantas, la otra pueda suplir la demanda, asegurando así la continuidad y calidad del servicio.
El plan de inversiones, con un presupuesto total de 100 millones de euros, está orientado a reforzar la capacidad operativa del sistema metropolitano de abastecimiento mediante la creación de vías alternativas de suministro que garanticen la continuidad del servicio ante posibles incidencias. Además, busca reducir la vulnerabilidad del sistema frente a eventos adversos, como fenómenos meteorológicos extremos, y asegurar un suministro constante y de calidad. Otro de sus ejes fundamentales es la mejora de la flexibilidad operativa, permitiendo ajustar la distribución del recurso hídrico según las necesidades específicas de cada momento y zona del área metropolitana.
Hasta la fecha, se han completado varias fases del proyecto de interconexión:
- Primera fase: Finalizada en septiembre de 2021, consistió en la construcción de un tramo inicial de la conducción que conectará ambas plantas. Esta etapa sentó las bases para las siguientes fases del proyecto.
- Fase actual: En marzo de 2025, se está ejecutando un tramo de aproximadamente 1,5 kilómetros entre la salida de Xirivella y la carretera CV-36. Se prevé que esta fase concluya en noviembre de 2025, acercando la finalización de la interconexión total.
En febrero de 2024, se llevó a cabo una de las actuaciones más destacadas del proyecto: la instalación de una doble conducción de acero, cada una de 1,4 metros de diámetro y con una longitud total de 11 kilómetros. Esta infraestructura permite aumentar significativamente la capacidad de transporte de agua entre las plantas, mejorando la redundancia y seguridad del sistema.
Estas actuaciones suponen una inversión estimada de 13,5 millones de euros y forman parte de un plan que avanza por fases hasta 2026
La culminación de estas obras está prevista para finales de 2026, momento en el cual las plantas de La Presa y El Realón estarán completamente interconectadas, beneficiando a más de 1,7 millones de habitantes en 48 municipios del área metropolitana de Valencia.
La transformación de la planta potabilizadora de La Presa
La interconexión entre instalaciones estratégicas forma parte de una estrategia para mejorar la adaptación ante escenarios de riesgo
En los últimos años, la planta potabilizadora de La Presa (Manises) ha experimentado una profunda renovación orientada a incrementar su capacidad y eficiencia. Entre las actuaciones más destacadas se encuentra la incorporación de un nuevo decantador DELREB, cuya puesta en marcha se adelantó con motivo de la DANA. Esta infraestructura permite ampliar la capacidad de tratamiento en 650 litros por segundo, elevando la producción total de la planta hasta los 3.400 l/s.
También se ha mejorado el sistema de desinfección mediante radiación ultravioleta. Está previsto trasladar el reactor UV a una nueva ubicación sobre el colector de 2.000 mm de diámetro, actualmente en construcción, lo que permitirá optimizar su funcionamiento.
Por último, se están instalando nuevos colectores de 1.500 y 2.000 mm de diámetro en PRFV Amiblu PROX sostenible, que sustituyen a las conducciones interiores anteriores, insuficientes para transportar todo el caudal producido. Esta intervención refuerza la capacidad de distribución interna y minimiza el riesgo de desabastecimiento en Valencia y su área metropolitana.
Próximas actuaciones clave hasta 2026
El objetivo principal para los próximos años es completar la conexión definitiva entre las plantas potabilizadoras de La Presa (Manises) y El Realón (Picassent), lo que permitirá abastecer a gran parte del sistema, incluida la ciudad de València, desde cualquiera de las dos instalaciones. Esta interconexión dotará al sistema de mayor flexibilidad y garantía de suministro ante situaciones imprevistas.

Además, se contempla un refuerzo específico hacia la zona norte de València, con el fin de mejorar la capacidad de respuesta en áreas con alta demanda.
Estas actuaciones suponen una inversión estimada de 13,5 millones de euros y forman parte de un plan que avanza por fases, con el horizonte puesto en el año 2026 como fecha clave para la puesta en servicio de la infraestructura completa.
Sostenibilidad y eficiencia en las infraestructuras
El sistema de desinfección mediante radiación ultravioleta representa una solución eficiente desde el punto de vista energético y operativo
Las mejoras implementadas en el sistema metropolitano de abastecimiento incorporan criterios de sostenibilidad tanto en el uso de materiales como en la adopción de tecnologías más eficientes. La instalación de nuevos colectores de PRFV Amiblu PROX, un material sostenible y duradero, refuerza la capacidad de transporte del agua tratada reduciendo al mismo tiempo el impacto ambiental.
Asimismo, el sistema de desinfección mediante radiación ultravioleta, además de mejorar la calidad del tratamiento, representa una solución eficiente desde el punto de vista energético y operativo. Estas actuaciones contribuyen a optimizar el rendimiento hidráulico de las instalaciones y se alinean con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, especialmente en lo relativo a la gestión eficiente del agua y la resiliencia frente al cambio climático.
Coordinación institucional y gestión integrada
El sistema de abastecimiento en alta del Área Metropolitana de Valencia se apoya en un modelo de gestión compartida que garantiza una planificación y operación coordinadas. La Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (EMSHI) actúa como consorcio público que agrupa a los municipios metropolitanos para asegurar el suministro de agua potable en alta de forma conjunta y solidaria.
La cooperación entre EMSHI y Global Omnium, a través de la empresa mixta EMIMET, permite combinar la capacidad técnica y operativa de la gestión empresarial con la visión estratégica del consorcio metropolitano. Este modelo de gobernanza facilita la toma de decisiones alineadas con las necesidades del territorio y contribuye a una gestión eficiente, sostenible y resiliente del agua.