El Gobierno de Asturias ha acordado hoy destinar 1.152.646 euros a la creación y puesta en marcha de una plataforma digital del ciclo integral del agua que permitirá ganar eficacia en la gestión de este recurso básico. Esta herramienta supone el primer paso para la constitución del Observatorio del Agua, previsto en los planes directores de saneamiento y abastecimiento, que aspiran a garantizar el suministro en toda la comunidad, incluso en los peores escenarios de sequía.
Este proyecto, que se financiará con fondos europeos Next Generation, tendrá un plazo de ejecución de 32 meses: ocho para el desarrollo e implantación de la plataforma y 24 de mantenimiento. Entre otros objetivos, mejorará la gobernanza, reducirá pérdidas en las redes de suministro y avanzará en el cumplimiento de los objetivos ambientales a nivel autonómico, nacional y europeo.
Toda la información necesaria para la gestión del ciclo del agua se volcará en esta nueva herramienta, que incorporará también los datos históricos disponibles, actualmente diseminados en distintas plataformas pertenecientes a diferentes administraciones y sin conexión entre sí. El contrato prevé la integración, en una única plataforma digital, de un servicio de gestión, análisis avanzado y visualización de la información relacionada con los recursos hídricos, lo que favorecerá la agilidad y la eficacia en la toma de decisiones.
Asimismo, facilitará tareas como la cuantificación de los recursos hídricos disponibles tanto en aguas superficiales cómo subterráneas, la detección de pérdidas en las redes, el seguimiento de la calidad de las masas de agua, la gestión de eventos extremos de inundaciones y sequía o la gestión de alivios a cauces. Igualmente, la plataforma será muy útil para el seguimiento de las variables climatológicas y la modelización de escenarios de cambio climático, lo que redundará en una mejor gestión y capacidad de respuesta ante episodios de riesgo en el futuro.
Asturias dispone de un recurso total de agua suficiente para cubrir la demanda anual. Sin embargo, en años muy secos podrían producirse riesgos de desabastecimiento por la insuficiente capacidad de regulación del actual sistema y los efectos del cambio climático. Por ello, el Plan Director de Abastecimiento de Aguas del Principado 2020-2030, aprobado el año pasado, plantea la construcción de una red de arterias que conectarán embalses y conducirán el agua hacia las zonas de mayor demanda, como la costa o el área central. También dotará a todos los concejos de una fuente de suministro garantizada y diversificará las fuentes de abastecimiento.
