El presidente Otto Pérez Molina aseguró que “Guatemala enfrenta la peor crisis de los últimos años”, derivado de la sequía provocada por la falta de lluvias en gran parte del país que afecta 1.2 millones de personas.
“En este momento, la misión del gobierno es que no falte el alimento en más de 200.000 hogares, con la mística que nos caracteriza a los guatemaltecos y el apoyo de la comunidad internacional, saldremos adelante”, aseguró el mandatario, quien se reunió con unos 80 delegados del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) y de la Secretaría de Seguridad Alimentaria (Sesan) quienes realizan trabajo de campo y serán los encargados de desarrollar la estrategia “Acciones por Alimentos” que se implementará en las zonas afectadas por la sequía.
El trabajo consiste en la ejecución de sistemas de riego, atención a la segunda cosecha en algunos casos y actividades de refuerzo del Pacto Hambre Cero, entre otras acciones, que buscan mayor participación de la comunidad como soporte de los esfuerzos del Gobierno para superar los retos surgidos tras la falta de lluvia.
Para el presidente Pérez Molina, la crisis actual es un reto más difícil de atender más allá de los efectos presentados para el país durante las tormentas tropicales Mitch, Stan y Ágatha, así como el terremoto ocurrido en el occidente del país.
Durante la actividad, la vicepresidenta Roxana Baldetti pasó revista al trabajo realizado por representantes del Maga y Sesan, en los 22 departamentos del país, y se enmendaron errores existentes con la intención de garantizar la efectividad en la atención de los damnificados.
Actualmente se cuentan con 28.000 raciones que serán distribuidas para tener la certeza que las familias afectadas tengan alimento en sus hogares.
Fuentes oficiales explicaron que existe reserva de alimentos para abastecer hasta finales de septiembre a las poblaciones necesitadas. Por ello, el próximo lunes sale el primer contingente con granos básicos desde la capital hacia el corredor seco y será la primera de seis entregas que el Gobierno hará a unas 270 mil familias en todo el país. No obstante, los tres departamentos en donde iniciarán las entregas registran hasta el 98 por ciento de pérdidas de sus cultivos y por tal razón han sido priorizados, señaló la Vicemandataria.
Debido a la escasez prevista para después de octubre, el Gobierno de la República busca adquirir a precios favorables los alimentos que se distribuirán a las familias afectadas por la canícula prolongada, por lo que la Vicepresidenta gestiona la apertura de una carta de crédito que le permita al país comprar insumos a precios de mercado internacional.
Baldetti explicó que los precios que se podrían obtener para la compra de los alimentos son más accesibles que los cotizados por medio de un contrato abierto. Dicho procedimiento será abordado por la Mesa de Seguridad Alimentaria instalada para establecer los mecanismos a seguir para mitigar la escasez de alimentos en 16 departamentos.
Monitoreo y evaluación
El Ejecutivo espera la mayor eficacia en la entrega de ayuda para los damnificados por la sequía, con la implementación del Sistema Mónica, que consiste en un Plan de Monitoreo de la Canícula Prolongada, el cual será ejecutado de forma interinstitucional.
Además, la vicepresidenta Roxana Baldetti, hizo un llamado para que se unan los sectores que deseen apoyar en la atención de la emergencia en beneficio de las más de 200.000 familias afectadas, a quienes se desea dar respuesta por medio de una adecuada logística operativa, que garantice la efectiva distribución de alimentos, pues se trata de un asunto de interés y emergencia nacional, por lo que todas y todos los miembros del Estado de Guatemala deben colaborar para atender la situación.