En Haití para muchos el agua es un lujo: un 52% de los habitantes de zonas rurales no tienen acceso a un recurso tan básico como el agua potable. Esto significa que para realizar tareas cotidianas como ducharse, cocinar o lavar la ropa deben desplazarse a ríos o a pozos con agua poco fiable, hecho que aumenta el riesgo de contraer enfermedades como el cólera.
Pero, con soluciones simples y accesibles, las propias comunidades están encontrando una salida al problema. En el siguiente video les mostramos cómo la comunidad de Simón, en el sur del país, está logrando que buena parte de sus vecinos puedan disfrutar de agua potable, en lo que significa el primer paso para salir de la condición de pobreza en que generalmente viven.