El presidente en funciones de Haití subrayó el enorme sufrimiento de su pueblo por el azote de una serie de epidemias importadas de todas partes en años recientes, entre ellas la del cólera.
Al dirigirse al pleno de la Asamblea General de la ONU, Jocelerme Privert, señaló que para vencer esos flagelos no basta con la declaración de buenas intenciones, por reconfortantes que éstas sean, y demandó apoyo concreto y eficaz en materia de saneamiento.
Privert puntualizó que uno de los desafíos más grandes es el recrudecimiento de los casos de cólera en los últimos meses, lo que ilustra la magnitud del deterioro de la situación humanitaria.
“El Gobierno de la República de Haití ha tomado nota y se complace por las declaraciones del Secretario General respecto a dos situaciones que incomodan a la Organización. Me refiero a los múltiples abusos sexuales perpetrados por personal de la paz y la introducción del cólera en Haití. El reconocimiento por la ONU de su responsabilidad moral en la segunda, abre el camino a varias deliberaciones con respecto a la obligación de eliminar de una vez por todas esta epidemia”, señaló el mandatario en ejercicio.
En este sentido, confió en que el llamado de Ban Ki-moon para aplicar un programa reforzado de lucha contra el cólera y de ayuda material a las víctimas y sus familiares responda plenamente a lo que aspira el pueblo haitiano.
