El presidente de la Coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos, Jesús Estachod, ha afirmado este lunes en la capital altoaragonesa que "hay que buscar otra solución" al problema planteado en torno a la construcción de una presa para regular el río Gállego, en el término municipal de Biscarrués, porque el proyecto "tiene una serie de condicionantes y contradicciones importantes".
Ha asegurado que "veintisiete años de lucha son muchos años", añadiendo que este proyecto "no va hacia adelante". Se cumplen 27 años del inicio de la lucha contra la construcción de Biscarrués.
La coordinadora es contraria a la construcción del pantano para regular el río Gállego
La coordinadora es contraria a la construcción del pantano para regular el río Gállego por considerar que cercena la actividad económica de la zona de La Galliguera, vinculada a la práctica de los deportes de aventura que posibilitan las aguas del Gállego.
Esta entidad se constituyó en el año 1996, pero anteriormente se fundó COAPE, que "fue el inicio de la coordinación de los que se oponían a la construcción del pantano. Luego se creó la Coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos y entre, una y otra, ya son 27 años los que llevamos de lucha contra el mismo proyecto", ha explicado.
En su opinión, "no se puede tener a una zona permanentemente durante 27 años pendiente de si se hace una obra o no se hace, de si nos quitan tierras o no, así no se puede estar, porque nos están condicionando el futuro".
Estachod ha recordado que "al principio de nuestra lucha era desmoralizador y considerábamos que luchábamos contra algo muy grande para nosotros, pero a base de fe e ilusión hemos ido dándole golpes al proyecto y hemos logrado, de entrada, que el de 192 hectómetros cúbicos se anulara y ahora estamos luchando contra el pequeño".
Potencialidades
Además, con el paso del tiempo, la coordinadora ha cambiado su táctica y no sólo se opone a la construcción de la obra hidráulica, sino que también está poniendo de relieve las potencialidades de la zona donde se pretende ubicar.
"Estamos intentando, además de decir no, dar a conocer la potencialidades que tiene la zona de La Galliguera y por eso estamos siempre pendientes de potenciar el desarrollo de las deportes de aventura, del rafting, de las rutas de senderismo o de las de BTT, por ejemplo".
Ha argumentado que la construcción del pantano "nos cercena toda la actividad y es que desde que el rafting se puso en marcha han sido miles las personas que vienen, los que conlleva movimiento económico porque se quedan a dormir, a comer y compran. Estamos hablando de 100 puestos de trabajo directos y más de trescientos indirectos que viven de esta actividad".
En la actualidad, las obras del pantano de Biscarrués están pendientes de licitación y la previsión es que se adjudiquen este verano con un presupuesto de 150 millones de euros. Esta obra forma parte de un sistema de regulación del río Gállego que incluye la balsa lateral de Almudévar, que ya está licitada por unos 200 millones de euros.