La localidad burgalesa de Aranda de Duero desarrollará un proyecto que tiene como principal objetivo integrar el río Duero en el entorno urbano de la ciudad a través de barcas y actividades de playa.
La villa, que alberga cuatro playas fluviales, pondrá en marcha un proyecto que incluirá un recorrido en barca y senderos a través del bosque Lineal para recorrer el anillo verde de la Ribera donde, además, se podrán realizar varias actividades al aire libre.
La ciudad especialmente conocida por su cultura, patrimonio, gastronomía y por sus vinos con D.O. Ribera del Duero, busca ahora destacar por sus espacios verdes en torno a la Ribera del Duero.
El proyecto trata de retomar la vida del río de antaño.
El proyecto, que trata de retomar la vida del río de 'antaño', consta de varias zonas y actividades que ya están en marcha a la espera de que los más aventureros las pongan a prueba.
La idea comenzó con el objetivo de recuperar una acción que se desarrollaba en el mismo hace algo más de 30 años, los paseos en barca, y fomentar otras que resultan interesantes para todo tipo de públicos.
Para ello, se creará y completará un 'anillo verde' que parte del Parque de Barriles, continúa por la Curva del Amable hasta llegar a la senda de Allende Duero, pasando por el Puente Aranda llegando a la ruta GR-14.
A lo largo de este recorrido, que dura 45 minutos aproximadamente, se podrán realizar paradas para disfrutar de las cuatro playas fluviales: Picón, Barriles, Tenerías y la de acceso exclusivo de emergencias, todas ellas habilitadas con ducha, rampas para acceder al agua y espacio para tomar el sol y darse un baño.
Esta iniciativa se completa con la posibilidad de realizar actividades al aire libre para todos los públicos como tirolina o pasos tybetanos, entre otros a lo largo del cauce del Duero, gracias a la creación y desarrollo de dos puntos de ocio y aventura.
