Panamá y Trinidad y Tobago han sido seleccionados para desarrollar un proyecto piloto dentro del componente de fortalecimiento institucional y de políticas para consolidar iniciativas para la protección y desarrollo del ambiente marino en el Caribe en el contexto del proyecto Gestión de Aguas Residuales (GEF CReW), auspiciado por el Fondo Ambiental Global (GEF) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En reunión sostenida con el comité preliminar de consulta a nivel nacional en Panamá del proyecto, en enero 2014, se ha identificado la Isla Colón en Bocas del Toro como sitio potencial para el proyecto, debido al avance del diagnóstico y plan ambiental municipal de la isla.
La Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM) expuso el interés y necesidad de Panamá de sumar esfuerzos y recursos para este proyecto piloto y en un taller de consulta nacional presentará las actividades para su validación.
Panamá participó en la reunión del comité directivo de este proyecto, a fin de presentar los avances del país y las iniciativas futuras, respecto al fortalecimiento de capacidades en el manejo de aguas residuales en un sitio clave del Caribe panameño.
Esta estrategia cuenta con la colaboración de los sectores involucrados en el sector y área de estudio, Comisión Consultiva Municipal, Autoridad de Turismo, Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Proyecto Corredor Biológico Mesoamericano del Atlántico Panameño (CBMAP), Autoridad de los Recursos Acuáticos (ARAP), Ministerio de Salud (MINSA), institutos de investigación, universidades, ONGs.
En 2011, el GEF, en sociedad con el BID y el Programa de Naciones Unidas para el Ambiente (PNUMA), lanzó este proyecto con el objetivo de probar mecanismos de financiamiento que provean recursos sostenibles para un manejo con bases ambientales concretas y una relación costo-efectiva de las aguas residuales en la región insular y centroamericana del Caribe.
La agenda de trabajo incluye la conformación del comité científico, técnico y asesor; el fortalecimiento de capacidades en materia de regulaciones de aguas residuales y aguas marino-costeras, monitoreo de ecosistemas marinos, sistemas de información integral y la valoración económica del control de las cargas contaminantes domésticas.
Además se contemplarán las iniciativas que requieren financiamiento; entre otras, la promoción e implementación del protocolo de fuentes terrestres de contaminación (PFTCM), las iniciativas público-privadas y comunitarias y también alianzas con los países del Caribe beneficiarios de la fase 1 del proyecto.
Los resultados de este proyecto piloto priorizarán aquellas actividades sujetas a financiamiento en la fase 2 del proyecto, a partir del 2016.