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LTL analiza los nuevos cambios en el control de calidad de las aguas de consumo

El Real Decreto 3/2023 ha introducido nuevos criterios técnico-sanitarios para asegurar la calidad del agua de consumo humano, generando una necesidad de adaptación por parte de los distintos agentes implicados. En este contexto, la analítica del agua y el papel de los laboratorios especializados en el control de la calidad del agua toma especial relevancia.

La entrada en vigor del Real Decreto 3/2023, que establece nuevos criterios técnico-sanitarios para la calidad del agua de consumo humano, ha desatado una corriente de cambios para la adaptación de los agentes involucrados a estos nuevos requerimientos. El debate se ha abierto en torno a nuevos planteamientos, soluciones tecnológicas, equipos especializados y sistemas de filtración más avanzados.

En este contexto, no se puede pasar por alto la propia analítica del agua y cómo afecta la nueva normativa al control de la calidad del agua realizado por los laboratorios especializados.

Laboratorios Tecnológicos de Levante es uno de los principales laboratorios de control y seguridad analítica. Son especialistas en agua, medioambiente y alimentación. En aguas acumulan más de 32 años de experiencia al frente de la analítica de aguas de consumo, el control de aguas depuradas y la caracterización e identificación de aguas continentales (ríos, embalses, subterráneas) y aguas marinas.

Su amplio control de las aguas y su apuesta por la innovación ha dado como resultado un laboratorio de análisis avanzado, con extensas acreditaciones, metodologías pioneras y un fuerte equipamiento tecnológico que le permite ofrecer un completo abanico de analíticas enfocado en la seguridad biológica y la investigación.

Sus capacidades le han permitido adaptarse a los nuevos requerimientos analíticos que marca el RD 3/2023 de forma inmediata a su entrada en vigor. Este laboratorio está preparado para acompañar a los agentes de gestión y operadores del tratamiento y abastecimiento de aguas potables en el cumplimiento de la normativa, en su adaptación y en sus proyectos de validación de procesos o innovación.

LTL está preparado para acompañar a los agentes de gestión y operadores del tratamiento y abastecimiento en el cumplimiento del RD 3/2023

En el ámbito analítico, el RD 3/2023 está enfocado a poder certificar la calidad del agua para el consumo humano y que esta cuente con unas determinadas características fisicoquímicas y microbiológicas que garanticen que es segura para la salud pública. Más aún, en un momento en el que la regeneración y reutilización del agua se exponen como la llave para asegurar la sostenibilidad del agua para la vida.

Laboratorios Tecnológicos de Levante analiza cómo afectará esta nueva normativa a los laboratorios de control.

¿Qué novedades afectan a la analítica del agua?

Se añaden a la lista de parámetros nuevos contaminantes adicionales que son objeto de preocupación, como el bisfenol A o los PFAS

Muchas de las novedades de esta normativa van orientadas a la vigilancia y medición de nuevos elementos y sustancias en el agua, la mayoría como obligatorio cumplimiento, e incluyendo otras sustancias como “lista de observación”, para aportar conocimiento sobre los contaminantes emergentes. Y es que, conforme avanza la ciencia y los métodos de análisis, se contempla el estudio de los posibles efectos de parámetros hasta ahora no controlados y con efectos desconocidos sobre la salud humana.

Parámetros relacionados con la desinfección del agua. Los ácidos haloacéticos, cloritos y cloratos son algunos de los nuevos parámetros requeridos en la calidad del agua, que complementan el control de la desinfección, que en la anterior legislación se centraba en trihalometanos y bromatos. Para estos compuestos se han establecido niveles estrictos que obligarán a los gestores de tratamientos potabilizadores de las aguas a mejorar los tratamientos para reducir su formación sin comprometer la desinfección. La detección de estos parámetros se realiza a través de métodos y equipamiento avanzados, como cromatografía de gases, líquida e iónica.

Se añaden también a la lista de parámetros nuevos contaminantes adicionales, que son objeto de preocupación por su posible presencia en las aguas y sus previsibles efectos negativos en la salud. Estamos hablando de sustancias como el bisfenol A (un plastificante), o los PFAS, sustancias químicas fluoradas, que provienen de la actividad industrial, ya que se usa en la fabricación de una gran cantidad de productos.

Como otra novedad en el plano analítico, el uranio entra a formar parte de la lista de parámetros químicos; en este caso, se controla por su toxicidad química (ya que las propiedades radiológicas del agua se controlan con los parámetros de radiactividad). La detección del uranio en el laboratorio se realiza a través de metodología ICP de masas, junto con el resto de metales pesados.

Esta normativa también amplía la detección de parámetros relacionados con la seguridad microbiológica, entre los que destacan los colífagos somáticos. Estos virus son un indicador de calidad microbiológica del agua bruta y de la capacidad del tratamiento para proporcionar un agua segura, microbiológicamente hablando, para el consumo humano. También se añaden los enterococos intestinales y la Legionella (para edificios prioritarios, como centros sanitarios, residencias, etc.), como parámetros de seguridad microbiológica.

Una de las incorporaciones más destacadas en el RD 3/2023 es la incorporación de una Lista de Observación, que incluye sustancias cuya presencia en el agua de consumo humano suscita preocupación por sus posibles efectos nocivos, y las cuales se están investigando. Esta lista incluirá, entre otros contaminantes emergentes, los conocidos disruptores endocrinos (como el nonilfenol y el beta-estradiol). Las sustancias de esta lista deberán ser controladas en las aguas, para seguir su evolución y aportar conocimiento adicional sobre su presencia en el agua de consumo.

También incluye el control de la presencia de fármacos, de los que se han seleccionado la azitromicina (un antibiótico) y el diclofenaco (antiinflamatorio); son de uso muy extendido y su presencia en las aguas de consumo puede obligar a afinar los métodos de tratamiento en las potabilizadoras. Finalmente, se menciona el control de microplásticos, pero sin concretar por la falta de una metodología normalizada para su determinación. Como hecho relevante, recientemente se ha aprobado la Decisión Delegada de la Comisión, del 11 de marzo de 2024, por la que se completa la Directiva (UE) 2020/2184 del Parlamento Europeo y del Consejo, que ya establece una metodología para medir los microplásticos en las aguas destinadas al consumo humano, con lo que es inminente la incorporación de este parámetro a los controles de la lista de observación.

Muchas de las novedades de esta normativa van orientadas a la vigilancia y medición de nuevos elementos y sustancias en el agua

Además de estos elementos que se destacan por su relevancia actual o ser novedad, el RD 3/2023 también ha actualizado los límites para contaminantes que ya se controlaban, como el cromo, el plomo o los plaguicidas prohibidos/no autorizados.

De entre todas estas incorporaciones a la lista de requerimientos a la calidad del agua potable, los nuevos parámetros de desinfección pueden ser los más que más incidencias generen, y obliguen a los gestores a modificar los tratamientos, con los costes que su implantación.

¿Qué exigencias suponen para los laboratorios de análisis?

Estas novedades suponen para los laboratorios de control una mayor exigencia en su capacidad de análisis, metodología, acreditación y equipamiento. Para los laboratorios, tal como cuenta Laboratorios Tecnológicos de Levante, la normativa conllevará un mayor peso para el área de cromatografía, que interviene en la detección de gran cantidad de parámetros de nueva incorporación y con límites actualizados.

Precisamente, en cuanto a las acreditaciones, se debe considerar que la nueva normativa exige que la toma de muestras esté acreditada, con base en la normativa ISO 17025, y que el alcance de la acreditación en análisis de agua incluya los parámetros necesarios.

¿Afectará a los tiempos de analítica?

Esta normativa amplía la detección de parámetros relacionados con la seguridad microbiológica, destacando los colífagos somáticos

En principio, en laboratorios con la suficiente capacidad, estas exigencias no supondrán una dilatación en los tiempos de analíticas y entrega de resultados. La planificación de la toma de muestra, envío y analítica será esencial para garantizar los plazos, y permitir así un proceso fluido en el ciclo del agua.

En definitiva, el RD 03/2023 de aguas de consumo también supone cambios para los laboratorios de aguas. Esta normativa aumenta el peso de los laboratorios en el proceso de potabilización del agua. En el caso de Laboratorios Tecnológicos de Levante, se han reforzado su papel de apoyo, investigación y desarrollo frente a los cambios en los tratamientos para garantizar que los gestores cumplan estos nuevos parámetros.

En este sentido, Laboratorios Tecnológicos de Levante abarca toda la analítica del ciclo integral del agua, y tiene en marcha proyectos de investigación en este ámbito relacionados con el estudio genómico de las aguas para la identificación de microorganismos a través de la biología molecular; o la aplicación de estas técnicas genómicas para el estudio e investigación de residuos antibióticos en aguas de depuración y bacterias resistentes, con el fin de acompañar en el desarrollo de nuevos tratamientos para el agua.