Frecuencias ultrasónicas probadas científicamente pueden controlar diversos tipos de algas. Una diferenciación muy común se establece entre las algas verdes y las cianobacterias tóxicas, también conocidas como algas verdeazuladas.
1. Crea una capa de sonido
Las algas verdeazules y unas algas verdes son capaces de desplazarse verticalmente en la columna de agua gracias a las vesículas del gas que poseen. Las ondas ultrasónicas crean una presión sónica en el estrato superior del agua.
2. Falta de luz
Esta barrera de sonido ultrasónica impide a las algas que suban de la superficie para tomar luz solar, dificultándoles hacer la fotosíntesis. Este efecto frena el crecimiento acelerado de las algas.
3. Controla el crecimiento de las algas
Las algas se mueren mientras que la membrana de la célula se mantiene intacta, previniendo la liberación de las toxinas al agua. Las algas se hunden al fondo del cuerpo de agua y son degradadas por las bacterias presentes.