El vicepresidente de la República y comisionado para la inversión pública y privada, Oscar Ortiz, junto al viceministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Ángel Ibarra, y la secretaria ejecutiva Trinacional del Plan Trifinio, Miriam Hirezi, verificaron el avance de la construcción de la planta de tratamiento de aguas residuales del municipio de Metapán, en el departamento de Santa Ana.
Se constató que a la fecha se tiene un avance del 70% en la construcción de la planta que esta generando 75 empleos directos y beneficiará a miles de habitantes de la zona.
El Vicepresidente destacó la importancia de este tipo de proyectos para el desarrollo de los municipios. “Esta es una obra pionera, es un modelo de participación donde se involucra el gobierno local, el Gobierno Nacional y la empresa privada”, aseveró.
El proyecto se ejecuta gracias al convenio firmado, en mayo de 2016, por la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA), la empresa Holcim, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) y la Dirección Ejecutiva Nacional del Plan Trifinio, El Salvador.
La iniciativa surgió luego de una serie de investigaciones de los humedales de Metapán, realizadas por la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), apoyada por Holcim en el año 2009. Los resultados de las investigaciones revelaron que la laguna de Metapán sufre altos índices de contaminación provocados, en gran parte, por las aguas residuales, por lo que se recomendó construir de manera urgente una planta que les diera tratamiento.
Ante esta situación, se fueron uniendo esfuerzos con el Gobierno Central, creando un comité interinstitucional integrado por representantes de la alcaldía de Metapán, Holcim, Plan Trifinio, ANDA, MARN, Fisdl y fondos Fantel, que facilitaron la concretización de cómo se asignarían y ejecutarían los recursos.
Para la construcción de la planta se prevé una inversión de $2.9 millones de dólares, con el fin de darle el tratamiento correspondiente a las aguas residuales y proteger la salud de los habitantes que estén en contacto con el agua de la zona.