El ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Javier Piqué, informó que el objetivo del Gobierno es cerrar al 100% la brecha en el suministro de agua en las áreas urbanas y al 85% en las zonas rurales del país. "Esperamos que la inversión privada empiece a mejorar, de manera que el crecimiento del país se empiece a notar en el segundo semestre y tengamos los recursos para invertir y cerrar esa brecha", detalló.
Piqué participó en la ceremonia de cierre de gestión del "Proyecto SABA: Agua que reduce brechas", propósito realizado de manera conjunta entre el Estado y la Cooperación Suiza y que ha permitido la ejecución de cerca de 1700 proyectos de agua y saneamiento en beneficio de dos millones de personas de zonas rurales del país.
En este contexto, el Estado peruano invirtió alrededor de 1800 millones de soles en 14 regiones del país, en dos décadas de trabajo, la misma que se inició a finales de los años noventa en Cajamarca y Cusco, para luego expandirse. "Este proyecto es un ejemplo de la constante cooperación en el tiempo, han beneficiado a más de 2 millones de personas", indicó Piqué.
En este periodo, la inversión se realizó en conjunto entre los ministerios de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Desarrollo e Inclusión Social, Salud, Educación, Foncodes, así como gobiernos regionales y locales.
Por su parte, la Cooperación Suiza aportó con 162 millones de soles en el marco de este proyecto. El trabajo coordinado entre el Estado peruano y la Cooperación Suiza, en este marco, alcanzó el 80 % del territorio nacional en al menos 5 mil comunidades rurales.
Esta labor ha dejado un legado de transformación social en manos del Estado Peruano y las comunidades rurales organizadas. Hoy el país cuenta con un sistema de gestión pública que debe asegurar que el 72% de cobertura de agua y saneamiento mejore en el cierre de brechas tales como ampliar el acceso a agua clorada, lavado de manos y repotenciar el 25% de infraestructura rural de agua y saneamiento.