En septiembre de 2015 el agua circuló por primera vez por las tomas parcelarias del distrito de riego de Central Plains en Nueva Zelanda. El nuevo distrito está situado en la región de Canterbury, al sur de la ciudad más grande de Isla Sur, Christchurch. El distrito, toma el agua del río Rakaia, con un canal de 17km que suministra el agua a una red de tuberías de 130km.
Rubicon fue subcontratada para proporcionarle al distrito el hardware y software SCADA, incluyendo:
- 145 pedestales, de comunicación y control, en las tomas parcelarias para monitorear remotamente el caudal y presión de las tuberías, y para encender y cerrar las válvulas
- El sistema de comunicaciones por radio
- El sistema central SCADAConnect®
CPWL también contrató a Rubicon para desarrollar los requisitos de su sistema de gestión de riego. La fase de análisis y especificación de los requisitos tardó cinco meses y supuso que CPWL adquiriera módulos adicionales del software Confluent™ para la gestión de la demanda, gestión de fuentes de agua mezclada y facturación. El diseño detallado para la adaptación del software conllevó un mes, y el desarrollo, pruebas e implementación, menos de tres meses. El sistema estaba operativo para la fecha planeada el 1 de septiembre de 2015 y la última versión de la solución del software para la fecha planeada el 1 de noviembre de 2015.
Un aspecto interesante de la solución CPWL es el modo en que el software gestiona el racionamiento del agua cuando la demanda excede al suministro disponible. En lugar de racionalizar reduciendo las tasas de caudal, lo que no es apropiado para los aspersores a presión del sistema, nuestro software estándar se adaptó para racionalizar el tiempo en el que pueden funcionar los aspersores.
Este proyecto ha sido un muy ejemplo de la capacidad de Rubicon de proporcionar sistemas complejos e integrados adaptados para cubrir necesidades específicas de los clientes.
La primera fase del sistema suministra agua a 120 explotaciones agrarias y se espera que aporte aproximadamente mil millones de dólares a la economía de Nueva Zelanda en forma de aumento de la producción agraria. Hay planeadas otras dos fases para aumentar el área de riego de 20.000 a 60.000 hectáreas.