El Acueducto del Chaco Central que se construye entre Puerto Casado y Loma Plata avanza en sus diferentes tramos, pero las continuas lluvias que se dan en los últimos meses juega en contra de la celeridad de este proyecto. La obra una vez terminada dará agua potable a unas 70.000 personas.
El factor climático es lo que único que podría ocasionar atrasos en la terminación del acueducto, manifestó Luis Sisul, titular de la Dirección de Agua Potable y Saneamiento (DAPSAN), dependiente del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
De hecho, ya se está procediendo a la prórroga en los contratos con las empresas contratistas, pero sólo en lo referente al plazo no al costo, aclaró Sisul. En la zona del riacho Yacaré los trabajos están paralizados prácticamente desde hace 2 meses, debido a que los canales están inundados de agua y hay que aguardar que paren las lluvias, o se desagoten, y después que se seque el terreno para proseguir. Sin embargo, el período de lluvias recién se inicia en octubre.
La obra está divida en tres frentes. El primero de ellos contempla la planta de tratamiento, toma y bombeo de agua, en Puerto Casado. Se espera que para fines de junio estas obras estén terminadas.
Los otros frentes son construcción de las zanjas y la instalación de los caños en las mismas. Es en este punto donde se registran dificultades, debido a que los pozos fueron cubiertos por el agua y debido a la condición del terreno chaqueño tardan mucho tiempo en secarse. “Por ello, las empresas constructoras están utilizando motobombas para sacar el agua de las fosas; luego, hay que esperar que el sol seque bien las paredes y el fondo”, puntualizó Sisul.
La inversión total en esta obra es de unos 91 millones de dólares en la infraestructura, junto a otros 2 millones de dólares para las tareas de fiscalización. Según el cronograma de trabajo, esta obra tiene que estar terminada en diciembre de este año.