Las autoridades de Perú han informado este viernes de que la temperatura del mar en el Océano Pacífico ha comenzado a bajar tras haber alcanzado su máximo en junio, por lo que se ha descartado que la intensidad de fenómeno climático de El Niño sea "fuerte".
El presidente de un comité estatal multisectorial que estudia El Niño, Germán Vásquez, ha asegurado que se han detectado vientos fríos del anticiclón del Pacífico del Sur desplazándose hasta la costa del país, aunque ha añadido que a fines de este año se espera un leve calentamiento del mar nuevamente.
"Está descartada la posibilidad de que veamos un Niño extraordinario. Se ha visto una disminución de las temperaturas y esperamos que este evento, que es más un Niño débil, estaría culminando a fines de julio o en agosto", ha subrayado Vásquez.
'El Niño' provoca un incremento de las lluvias en algunas zonas y sequías en otras, afectando de manera diferente la producción de los países. En el caso de Perú, el mayor productor mundial de harina y aceite de pescado, el principal impacto es un incremento de las temperaturas del océano que aleja la anchoveta, además afecta los cultivos de aguacate y café.
Según la presidenta del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), Amelia Díaz, las temperaturas del mar se han elevado durante el mes de junio hasta 3 grados por encima de la media, pero "ya llegó a su máxima intensidad y ahora ha comenzado a declinar".
En ese sentido, Vásquez ha precisado que los recursos pesqueros como la anchoveta, materia prima para la harina de pescado, está retornando al país, tras haberse desplazado al sur del continente buscando aguas más frías.
La harina de pescado representa casi el 70 por ciento de las exportaciones pesqueras de Perú, cuyas ventas anuales suman unos 3.000 millones de dólares. El país produce un 30 por ciento de la harina de pescado mundial, con Europa, China, Japón, Indonesia y Canadá como principales mercados.