La Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (SUNASS) hace un llamado a las autoridades y a la población limeña a mejorar las prácticas de consumo de agua potable y evitar su derroche, en especial en estos meses de verano, más aun conociendo que, las reservas de agua cruda para la capital presentan un déficit del 30% en comparación con los registros históricos del último quinquenio.
En efecto, las reservas de SEDAPAL al 15 de diciembre son 30% menores que las del 2011, año que representa el menor volumen almacenado en este período. Es decir, la situación es 30% más crítica, que el año más seco observado en el período 2011-2015 al 15 de diciembre de cada año.
Las reservas de SEDAPAL al 15 de diciembre son 30% menores que las del 2011, año que representa el menor volumen almacenado en este período
En ese sentido, SUNASS exhorta a tomar conciencia sobre la importancia de cuidar el recurso hídrico a través de su campaña ¡AHORREMOS AGUA, ES VIDA! con el fin de sensibilizar a la población sobre la urgente necesidad de cambiar hábitos de consumo y evitar el derroche.
Lima es la segunda ciudad más grande del mundo ubicada en un desierto después de El Cairo. Sin embargo el Río Nilo tiene en promedio un caudal de 2830 m3/s. y el Río Rímac tiene un caudal de tan solo 26.6 m3/s, con la ayuda de los reservorios construidos (sistemas de lagunas, represas y un túnel trasandino) en la parte alta de Lima y Junín.
Sin embargo, pese a los esfuerzos por traer agua cruda a la franja costera, el consumo per cápita en Lima es de 250 litros al día, en promedio, es decir 150% más de lo necesario de acuerdo a lo sugerido por la Organización Mundial de la Salud (100 litros).
Este elevado consumo se debe a malas prácticas en su uso y a la baja valoración del servicio de agua potable, que debe ser cambiado teniendo en cuenta los riesgos de sequía que vienen afectando otras regiones del país.
La función de SUNASS, el regulador del agua potable, es normar, regular, supervisar y fiscalizar a las empresas de saneamiento a nivel nacional, resolviendo los reclamos en segunda instancia administrativa.
