Xavier de Pedro, presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, organismo autónomo, adscrito al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), ha participado en Amposta (Tarragona), en la reunión de la Comisión para la Sostenibilidad de las Tierras del Ebro, donde ha reiterado el compromiso del recientemente aprobado Plan Hidrológico de la Demarcación del Ebro con el objetivo de protección del Delta, lo que se refleja en el programa de medidas globales y de distinto tipo para su mejora. Por ello, ha defendido ante la Comisión el caudal que recoge el Plan para el Delta y ha insistido en que las soluciones para esta masa de agua pasan por realizar inversiones.
De Pedro, en este sentido, ha reiterado el anuncio que ya hizo el pasado mes de febrero también en Amposta en la “Jornada sobre las barreras salinas y de defensa deltaicas”, sobre que la Confederación Hidrográfica va a impulsar, en colaboración con la Agencia Catalana del Agua (ACA), actuaciones para la mejora medioambiental del Delta del Ebro (Tarragona). En concreto, nuevas obras de acondicionamiento de infraestructuras hidráulicas que permitirán optimizar la gestión y uso del recurso en el Bajo Ebro, influyendo en una mejora general de esta masa de agua.
Durante este año, la Confederación aportará una parte del aumento de ingresos que va a obtener
Para ello, durante este año, la Confederación aportará una parte del aumento de ingresos que va a obtener, como ya se anunció, por el nuevo reparto legal del canon por el trasvase a Tarragona que abona el Consorcio de Aguas de Cataluña.
El presidente del Organismo ha insistido en que el Plan incorpora medidas generales para la mejora de las masas de agua y entre ellas se encuentran los caudales ecológicos, que representan un claro avance respecto a la anterior planificación hidrológica y que deben ser entendidos como una garantía para años secos y no como un acuerdo de mínimos. En este sentido ha recordado algunas cifras de aportaciones del Ebro en Tortosa que reflejan la realidad de la Cuenca. El año hidrológico 2011-2012, en el que se sufrió una importante sequía, la aportación anual fue de 3.901 hm³ teniendo en cuenta, además, las restricciones de usos que se impusieron en la Cuenca, sin embargo, el siguiente año hidrológico 2012-2013, con diversos episodios de crecidas, la aportación se situó en 15.670 hm3.
Para De Pedro, el apoyo al Plan se basa en el equilibrio alcanzado entre, por un lado, las demandas, siempre dentro del ámbito de la Cuenca, incluidas las planteadas por la Generalitat de Cataluña para el desarrollo de su territorio y por el otro, los objetivos medioambientales. Según ha destacado, la aplicación de caudales ecológicos poco realistas y no basados en la disponibilidad de recurso, condicionaría no solo los usos futuros, si no también los actuales en la Cuenca. En este sentido, ha aprovechado para resaltar el papel fundamental del regadío en la protección ambiental del Delta, donde se ha convertido incluso en el garante de su supervivencia.
El Plan Hidrológico de la Demarcación, ha recordado también, ha sido fruto de un amplio consenso, incluido en él a representantes de Cataluña, como las comunidades de usuarios y el Ayuntamiento de Lleida y es reflejo de la gestión bajo el principio de Unidad de Cuenca. Por ello, en su proceso de revisión se pretende sumar a ese consenso sobre los caudales ecológicos a la Generalitat con la que se han mantenido las vías de diálogo en todo momento.