De la mano de AECID, INVESTAGUA ha dedicado la última sesión de su novena jornada, celebrada hoy jueves 22 de abril, a conocer los mecanismos de acceso al Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento, las grandes operaciones de inversión para los próximos años y los casos de éxito en enclaves emblemáticos.
Así, Carmen Jover, directora del Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento de AECID, que ha presentado el contexto de la región de América Latina y el Caribe, ha señalado que existe una diferencia de veinte puntos porcentuales de la cobertura de servicios de agua entre lo urbano y lo rural. En este sentido, hace más de una década España decidió apostar por mejorar esta situación y, a través del FCAS, y en la actualidad cuenta con 81 programas y una cartera total de 1.665 millones de euros para agua y saneamiento: “En el saneamiento y la depuración de América Latina y el Caribe es necesario un esfuerzo adicional considerable y es imprescindible la incorporación del sector privado”, ha señalado. En este sentido, desde el FCAS cuentan con dos formas de gestionar los programas: de forma bilateral (programas gestionados por AECID) y de forma multilateral (programas gestionados por BID), con las que han beneficiado hasta la fecha a 3,4 millones de personas. “Hemos ido evolucionando a tener más peso en el apoyo a políticas públicas, estrategias y planificaciones para operaciones de acceso al servicio”. Asimismo, Carmen ha resaltado el valor añadido de la Cooperación Española en agua y saneamiento, entre los que destaca su posicionamiento internacional, su facilidad y solidez de interlocución, el apoyo a las políticas públicas, el fortalecimiento institucional y su visión de desarrollo. “España es líder en la gestión pública e intentamos promover el intercambio experiencias, no como un trasplante, sino para adecuar y adaptar elementos más útiles”, ha señalado.
Las zonas rurales y periurbanas son las áreas con mayor dificultad para cerrar la brecha del acceso al abastecimiento y al saneamiento, y son precisamente en estas áreas objeto del Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento impulsado por la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID). Un ejemplo de éxito es Portoviejo, en Ecuador, que Leonel Muñoz, director de la Unidad de Gerenciamiento del Programa de Agua Potable y Alcantarillado, ha presentado los planes desarrollo cuyo fin es consolidar la solvencia para la inversión de infraestructura y equipamiento, automatizar los servicios, el manejo integral de desechos sólidos y poner en marcha un Plan maestro de Agua Potable para 2035. Para lograrlo, la fase previa es el Plan Portoviejo 2035 de agua y saneamiento, actualmente en marcha y con la cooperación de la AECID, que orienta a la región a planificar de manera integral su desarrollo tomando como punto de partida el aporte a los ODS y, en concreto, al Objetivo 6. Se trata del proyecto hídrico rural más grande de la historia de Ecuador y cuenta con una inversión de 122 millones de dólares de inversión para aumentar la cobertura de agua potable hasta un 81% y de alcantarillado al 68%.
Por su parte, Javier Enamorado, alcalde del Municipio de Gracias, cabecera del departamento de Lempira, al oeste de la República de Honduras, ha hablado de las inversiones en esta la zona rural, así como de los impactos en la salud y la calidad de vida. La Ley marco del Sector de Agua y Saneamiento en Honduras brinda la titularidad a las Municipalidades sobre la administración y operación de los sistemas de agua y saneamiento, y desde noviembre de 2020, el 99% de la población urbana cuenta con agua potable. Javier Enamorado ha señalado que, en la actualidad, cuentan con una inversión de siete millones de dólares por AECID y la Municipalidad a través del FCAS para la elaboración de Planes Maestros de agua y saneamiento a veinte años, la construcción de alcantarillado y PTAR de 42 l/s, una PTAP con capacidad de 120 l/s, la protección de la cuenca y la puesta en marcha de campañas de sensibilización del uso racional del agua: “El tema agua está haciendo que la ciudad se fortalezca. Ahora tenemos una sensación de pertenencia”.
Finalmente, Orlando Reyes, director general de Agua Potable y Alcantarillado Sanitario del Viceministerio de Agua Potable y Saneamiento Básico de MMAyA, ha hablado del Plan de Inversiones del Gobierno de Bolivia para la consecución de los derechos humanos al agua y el saneamiento: “Hemos constitucionalizado el derecho al agua”, ha señalado, destacando que la cobertura en agua y saneamiento ha aumentado un 14% durante el periodo 2001-2020, sin embargo, más de un millón de habitantes del área rural todavía no tienen acceso a una fuente mejorada de agua y cerca de 1,9 millones de habitantes no cuentan con acceso a saneamiento. En materia de inversiones, Orlando Reyes ha resaltado que el sector de saneamiento básico a triplicado la inversión ejecutada en los últimos quince años respecto a los diecinueve anteriores, con 16.261 millones de Bs, lo que evidencia el impulso que se dio al sector en el periodo 2006-2020. En ese sentido, en los últimos quince años de gestión de gobierno, se dio énfasis a las inversiones para agua, llegando a significar el 55,6% de las inversiones sectoriales, mientras que las inversiones destinadas a saneamiento fueron de alrededor del 5,6% y llegando al 8,9% en 2020. Finalmente, de cara al futuro, para el quinquenio 2021-2025, el sector ha proyectado una inversión de alrededor de 16.521 millones de soles bolivianos.
La sesión ha finalizado con una ronda de preguntas en la que los asistentes han trasladado sus inquietudes a los ponentes como, por ejemplo, el impacto de la COVID-19 en el sector del agua y saneamiento. En este sentido, Carmen Jover ha señalado que se ha producido un doble efecto en el que se han ralentizado las inversiones en esta materia, pero que la percepción de la importancia del ciclo del agua se notará especialmente a posteriori. Asimismo, han comentado los avances en el cumplimiento del ODS 6 de la Agenda 2030, entre los que se incluyen la adaptación al cambio climático y como esta incluye los servicios de agua y saneamiento: “Se trata de un tema de corresponsablidad tanto de las zonas urbanas como las zonas rurales”, ha comentado Leonel Muñoz.