Euskadi lidera el futuro resiliente de la gestión agua impulsando circularidad y digitalización
El Palacio Euskalduna de Bilbao se transformó ayer, 3 de octubre, en el núcleo de la innovación y sostenibilidad en la gestión del agua, albergando la jornada organizada por el Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia (CABB) y Aclima, Basque Environment Cluster. El evento reunió a los principales expertos y líderes del sector para abordar los desafíos más urgentes y explorar soluciones pioneras que definirán el futuro del manejo del agua.
Alejandro Maceira, fundador y director de iAgua, fue el encargado de iniciar la inauguración de este evento. En su discurso, destacó cómo este evento refleja el compromiso de ambas entidades con un futuro sostenible y cómo Euskadi se ha consolidado como un referente en innovación y en la gestión del agua ante los desafíos del cambio climático. Además, destacó que el Palacio Euskalduna, a orillas del río Nervión, simboliza la conexión profunda de Bilbao con el agua y su capacidad para adaptarse y transformarse, enlazando con la importancia de aplicar soluciones innovadoras que garanticen un uso eficiente y sostenible del agua, en sintonía con las necesidades actuales.
Por último, reconoció y felicitó a Aclima y el Consorcio de Aguas Bilbao por el esfuerzo conjunto que ha hecho posible esta jornada y su compromiso “con un sector que necesita innovar y transformarse para hacer frente a los desafíos del cambio climático y la economía circular”.
El programa del día se centró en temas esenciales como la gestión del abastecimiento y saneamiento, el impacto del cambio climático, la economía circular y la digitalización del ciclo del agua
Tras él, tomó la palabra Kepa Odriozola, presidente del CABB, que enfatizó en la importancia de contar con infraestructuras innovadoras, no solo como exigencia de la nueva normativa, sino también como respuesta a los retos que implica una gestión sostenible del agua, un compromiso que el CABB ha asumido de manera firme, señaló. También destacó el impacto del cambio climático, subrayando que el futuro debe centrarse en las energías renovables y la economía circular, que son dos vectores críticos esenciales para la gestión de las aguas urbanas. En el ámbito energético, Kepa mencionó que los operadores del agua tienen la responsabilidad de gestionar de manera eficiente los recursos energéticos, con el objetivo de alcanzar la autosuficiencia en el abastecimiento de agua.
Finalmente, Kepa resaltó que jornadas como esta son clave para fortalecer el sector del agua ante los desafíos actuales, y reafirmó que el CABB, desde su enfoque local, busca diferenciarse en el ámbito global.
Por último, Xabier Caño, presidente de Aclima, Basque Environment Cluster, resaltó la creciente incertidumbre sobre la disponibilidad de agua, subrayando que la escasez de este recurso es un factor limitante para el desarrollo de cualquier actividad. Esto ha convertido la evaluación del riesgo hídrico en un desafío estratégico crucial. En este contexto, marcado por la incertidumbre climática, Xabier señaló que los desarrollos tecnológicos y la implementación de la economía circular en la gestión del agua serán fundamentales para afrontar los desafíos actuales y futuros. Estas herramientas no solo permitirán adaptarse mejor al cambio climático, sino que también facilitarán mejoras integrales en la gestión del ciclo del agua.
Además, destacó el papel del PERTE de digitalización del ciclo del agua, que ha proporcionado un marco de financiación clave para modernizar la gestión del agua, no solo en las ciudades, sino también en los sectores del regadío y la industria. Este esfuerzo público refleja el compromiso con la sostenibilidad y la innovación en la gestión de los recursos hídricos.
Uno de los enfoques principales en la agenda fue el tratamiento de aguas residuales, alineado con la nueva directiva de la Unión Europea, que busca reducir la carga de contaminación vertida al medioambiente y mejorar la gobernanza del agua en línea con el Pacto Verde Europeo. Irene Morante, jefa de Área de Saneamiento y Depuración de la Subdirección General de Planificación Hidrológica del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), compartió una ponencia clave sobre las Nuevas Directivas de la UE para el Tratamiento del Agua: Perspectivas e Implementación.
Irene Morante destacó las principales novedades de la nueva Directiva de Tratamiento de Aguas Residuales Urbanas, subrayando su impacto en la gestión del agua en España. Entre los temas tratados, hizo especial énfasis en la mejora de los sistemas de tratamiento para alcanzar un enfoque más integrado y sostenible. Irene explicó cómo la Directiva incorpora tratamientos avanzados como el cuaternario para la eliminación de microcontaminantes, nuevos requisitos para la reutilización de agua y el impulso a la neutralidad energética en las plantas depuradoras.
Además, expuso los desafíos para la implementación en España, destacando la exigencia de cumplir plazos ajustados, redefinir aglomeraciones urbanas (10-25 h-e/ha), y aumentar de 2.000 a 3.400 las mayores a 1.000 h-e. Asimismo, las EDAR de más de 150.000 h-e deberán aplicar tratamientos más estrictos y las áreas costeras >1.000 h-e necesitarán sistemas colectores y tratamiento terciario. Otro punto destacado es la implementación del esquema RAP para financiar tratamientos cuaternarios, fomentando el reúso del agua, con exenciones para riego agrícola. Además, se exigirá neutralidad energética en plantas >10.000 h-e y un mayor monitoreo y vigilancia sanitaria.
A un nivel más local, Antonio Aiz, director general de la Agencia Vasca del Agua (URA), habló de los retos estratégicos del agua en Euskadi, que son cinco: (1) Mejora del modelo de gobernanza y transparencia; (2) Colaboración, concertación y coordinación interinstitucional, es decir, gobernanza colaborativa; (3) Seguridad hídrica, garantizar el abastecimiento, también saneamiento, depuración y reutilización; (4) Mejora de la resiliencia; y (5) Protección de los ecosistemas y la biodiversidad.
Hablando de cada uno de los retos, Antonio Aiz destacó que se ha mejorado el modelo de gobernanza y transparencia, priorizando la comunicación clara y accesible para las personas. Además, se ha avanzado en la digitalización de la agencia, alineada con la estrategia de transformación digital de Euskadi. En cuanto a la colaboración interinstitucional, se han firmado 81 convenios en los últimos cuatro años, reforzando la coordinación entre políticas del agua y urbanísticas. También se ha potenciado la colaboración público-privada, especialmente en la reutilización del agua en procesos productivos. En el ámbito de la seguridad hídrica, aseguró un sistema de abastecimiento resiliente que garantiza la calidad y cantidad de agua para consumo humano y sectores productivos, incluso en situaciones de sequía. Además, se han realizado importantes inversiones en la mejora de sistemas de saneamiento y depuración de aguas residuales.
Ya en los dos últimos retos, respecto a la resiliencia, Aiz señaló que se ha invertido cerca de noventa millones de euros en obras de defensa contra inundaciones, protegiendo tanto a la población como a infraestructuras, enmarcadas dentro de los planes de gestión de riesgos de inundación. Por último, subrayó el esfuerzo continuo en la protección de ecosistemas y la biodiversidad, con una inversión anual de 4,5 millones de euros, enfocada en la restauración de ríos y la mejora de ecosistemas acuáticos y terrestres.
La jornada también dio pie a dar conocer la estrategia del agua que sigue Aclima. Olga Martín, su directora general, destacó el enfoque estratégico del clúster hacia la sostenibilidad y la gestión eficiente del recurso hídrico. En este sentido, ha expuesto cómo la estrategia de Aclima se ha estructurado en torno a la protección del agua como un recurso estratégico, promoviendo su circularidad y reforzando la resiliencia de los servicios hídricos. Además, subrayó la importancia de integrar tecnologías innovadoras para la reutilización del agua, la reducción de contaminantes y el monitoreo de sistemas, todo ello alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030. Asimismo, ha destacado la contribución del sector del agua en Euskadi, con más de 150 empresas trabajando en diversos ámbitos del ciclo integral del agua, lo que refleja un ecosistema dinámico y clave para la sostenibilidad hídrica.
Por último, Olga Martín hizo énfasis en la necesidad de impulsar la innovación tecnológica, fomentar alianzas público-privadas y promover un uso responsable del agua, posicionando al sector en Euskadi como un referente en Europa.
Además, durante el evento se presentaron distintos proyectos emblemáticos en Euskadi, que son verdaderos ejemplos de innovación y sostenibilidad. En primer lugar, Fernando Ortega, subdirector de Sostenibilidad, Tecnología e Innovación del Consorcio de Aguas de Bilbao Bizkaia (CABB), habló de la Estrategia Galindo 2030.
Se trata de una iniciativa clave para el futuro del saneamiento y la depuración en la región, de la que detalló cómo se ha centrado, para ello, en la modernización y ampliación de las instalaciones del sistema Galindo-Lamiako, el más grande del consorcio. Asimismo, explicó las intervenciones ya realizadas, como la mejora de procesos, la integración paisajística y las soluciones tecnológicas avanzadas para reducir el impacto ambiental, incluyendo la implementación de tratamientos de decantación lamelar y lastrada de alto rendimiento para tiempos de lluvia.
Para finalizar, Fernando Ortega subrayó que el proyecto aborda importantes desafíos a futuro, como la necesidad de adaptarse a la nueva Directiva Europea de Aguas Residuales, la gestión de contaminantes emergentes y la recuperación de recursos como el fósforo, con el objetivo de garantizar la sostenibilidad del sistema y minimizar su huella ecológica.
A continuación, Batxi Aranburu, gerente general de Aguas Municipales de Vitoria-Gasteiz (AMVISA), presentó SMART AMVISA, que busca transformar la gestión del agua en Vitoria-Gasteiz de cara al 2025.
Batxi Aramburu explicó cómo SMART AMVISA ha sido diseñado para adaptar la empresa a un entorno cada vez más complejo y volátil, promoviendo la digitalización de los sistemas de gestión del agua y la optimización de procesos. Además, resaltó la importancia de no limitar la digitalización a la mera incorporación de tecnología, sino de abordar también la gestión del cambio dentro de la organización, capacitando a los empleados y redefiniendo los perfiles profesionales para adecuarlos al futuro de la empresa.
Además, destacó que el proyecto integra tecnología avanzada y análisis de datos para mejorar la eficiencia en la gestión del agua y optimizar el uso de recursos, con un enfoque claro hacia la sostenibilidad y la resiliencia de los sistemas hídricos de Vitoria-Gasteiz. “Las organizaciones no se transforman si no lo hacen primero las personas”, dijo a modo de mensaje final.
La jornada acogió dos mesas redondas que se centraron en los retos de la gestión del agua en diversas cuencas hidrográficas, que enfrentan diferentes situaciones climáticas, ambientales, sociales y económicas.
En la primera de ellas, enfocada en la cuenca norte, participaron: Pedro Mª Barreiro, director general del Consorcio de Aguas de Bilbao Bizkaia (CABB); Leire Zubitur, gerente de Servicios de Txingudi; José Angel Ercilla, director gerente de la Sociedad de Aguas de Añarbe; Batxi Aranburu, gerente general de Aguas Municipales de Vitoria-Gasteiz (AMVISA); y Roi Fernández Añón, director de Aguas de Galicia.
Se ha celebrado una mesa redonda enfocada en los retos de la gestión del agua en la cuenca norte
En primer lugar, Leire Zubitur abordó los esfuerzos en la adaptación al cambio climático. Ha explicado que desde Txingudi se ha elaborado un plan basado en los recursos hídricos disponibles y en la previsión de demandas de abastecimiento. Además, se ha desarrollado un plan de drenaje urbano sostenible, que permite anticiparse a eventos extraordinarios, como precipitaciones intensas. En cuanto a infraestructuras, Zubitur destacó que se han identificado tanques de tormentas a construir en los próximos años, con una inversión de quince millones de euros. También se dispone de un plan de sequías con distintos escenarios para garantizar el abastecimiento, incluso con infraestructuras como pozos subterráneos, que no se han utilizado en quince años, pero son esenciales como seguro de vida. Por último, subrayado la importancia de la digitalización, como tercera clave para hacer las infraestructuras del ciclo del agua más eficientes y capaces de anticiparse a los efectos del cambio climático.
A continuación, Roi Fernández Añón destacó que Galicia ha priorizado las inversiones en infraestructuras innovadoras para asegurar la sostenibilidad en la gestión del agua. Señaló que, en cuanto al abastecimiento, la región aún enfrenta una falta de capacidad de almacenamiento, lo que requiere atención urgente. También ha subrayado la importancia de las rías para Galicia, advirtiendo que si no se continúa con el saneamiento adecuado, se corre el riesgo de comprometer su capacidad para enfrentar los desafíos futuros. Además, mencionó la escasez de profesionales cualificados en el sector del agua en los municipios, tanto técnicos como mano de obra específica. Finalmente, sobre el modelo de gobernanza, ha explicado que en 2022 Galicia adoptó una ley para mejorar la gestión del ciclo integral del agua, reforzando la colaboración con los ayuntamientos. En este sentido, Aguas de Galicia ha ofrecido su apoyo a los municipios que carecen de capacidad para gestionar sus infraestructuras, colaborando en su modernización y posterior gestión.
Por su parte, Pedro M.ª Barreiro subrayó la importancia de la digitalización en el sector, destacando las ayudas que se recibirán a través de los PERTE. Sin embargo, señaló que la digitalización por sí sola no es suficiente, ya que muchas infraestructuras, especialmente en saneamiento, son muy antiguas y necesitan una renovación completa. Además, afirmó que la transformación debe ir de la mano entre la digitalización y la modernización de infraestructuras para mejorar su eficacia. Para finalizar, Barreiro anticipó un cambio radical en la gestión de aguas residuales en los próximos veinte años, impulsado por la Directiva TARU, y destacó el potencial de la inteligencia artificial en varios aspectos clave de la gestión del agua, como la detección y prevención de fugas, la optimización del uso del agua, el seguimiento de la calidad en tiempo real, la predicción de inundaciones, la reutilización del agua, el mantenimiento predictivo y los sistemas inteligentes de riego urbano. Asimismo, ha señalado la importancia de la IA para sensibilizar al consumidor y gestionar el impacto del cambio climático.
En su turno de palabra, Batxi Aranburu destacó la necesidad de que la sociedad reflexione sobre el modelo de ordenación territorial y estructura productiva que se quiere construir frente al cambio climático. Aunque se ha avanzado en la eficiencia de la gestión del agua urbana, no se puede ignorar el alto consumo de agua por parte de la agricultura. También señaló la importancia de agotar primero las políticas de gestión de la demanda, buscando reducir el consumo de agua por parte de la sociedad, antes de pasar a las políticas de oferta, como la reutilización del agua, si la escasez persiste. Además, mencionó que la inteligencia artificial será útil en la gestión diaria, aunque plantea desafíos en términos de consumo de agua. Finalmente, abordó el uso de la desalación en regiones costeras, subrayando que, aunque puede ser una opción viable, es fundamental considerar los altos costes involucrados y evitar financiar actividades que no serían rentables si internalizaran dichos costes.
Por último, José Ángel Ercilla, señaló que el cambio climático no ha tenido un impacto tan dramático en las cuencas cantábricas como en otras regiones, gracias a la regulación de presas que minimizan los efectos en el sistema de abastecimiento. Sin embargo, subrayó que la preocupación por el cambio climático sigue siendo máxima. Además, explicó que se ha implantado un plan de emergencia ante sequías y se ha realizado un estudio económico sobre el impacto de un escenario de sequía de dos años. Aunque tendría un efecto negativo, la entidad podría asumirlo sin necesidad de ajustar las tarifas inicialmente. También destacó que el saneamiento, como servicio más joven que el abastecimiento, ha avanzado significativamente en los últimos años. No obstante, muchas entidades aún no han ajustado sus tarifas para cubrir los costos de explotación o la renovación de infraestructuras. Por ello, defendió la necesidad de contar con tarifas suficientes y más flexibles para adaptarse a los costes y a la evolución normativa.
Los expertos coincidieron en la necesidad de ajustar las tarifas y aumentar la flexibilidad para afrontar los desafíos normativos y climáticos en la gestión del agua. En este sentido, José Ángel Ercilla subrayó la importancia de disponer de recursos tarifarios suficientes para cumplir con la normativa. Batxi Aranburu destacó la necesidad de mayor flexibilidad en la toma de decisiones ante las crecientes exigencias ambientales. Por su parte, Roi Fernández Añón planteó el reto de equilibrar los objetivos ambientales con la actividad económica para mantener el patrimonio natural y cultural. Además, Leire Zubitur señaló que la digitalización debe ir acompañada de una transformación cultural en las organizaciones, y mencionó la importancia de completar su proyecto en dos años. Por último, Pedro Mª Barreiro advirtió que la capacidad de inversión es insuficiente para cubrir el déficit de infraestructuras y sugirió que las tarifas deberían ajustarse según las necesidades futuras vinculadas al cambio climático.
Los expertos coincidieron en la necesidad de ajustar las tarifas y aumentar la flexibilidad para afrontar los desafíos normativos y climáticos en la gestión del agua
La segunda mesa, enfocada geográficamente en las cuencas centrales y meridionales y moderada por Belén Benito, directora de Operaciones de Canal de Isabel II, contó con la participación de: José María Infante Olarte, presidente del Consorcio de Aguas y Residuos de La Rioja; Antonio García Pastrana, gerente de Servicios Técnicos de Aguas de Burgos; Manuel Romero, consejero delegado de EMASESA – Empresa Metropolitana de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas de Sevilla; y Josep Xavier Pujol, gerente del Consorci d´Aigües de Tarragona (CAT).
La segunda mesa redonda se enfocó geográficamente en las cuencas centrales y meridionales
Así, José María Infante Olarte destacó el papel clave que juega la digitalización en el consorcio para enfrentar los nuevos retos. Durante su primera intervención, ha mencionado que se presentó un proyecto en la primera convocatoria del PERTE para digitalizar las infraestructuras del consorcio, proyecto que fue adjudicado. Este plan incluye la creación de gemelos digitales de las plantas más grandes, con la expectativa de que ayuden a mejorar la gobernanza del agua y cumplir los objetivos medioambientales. En cuanto a la planificación de decisiones, explicó que la junta de gobierno aprueba la propuesta de costes, la cual se comunica a los miembros en la asamblea. También señaló que se aplica un porcentaje de amortización de infraestructuras en la tarifa del agua, lo que permite reflejar los costes de inversión en las tarifas.
Por su parte, Antonio García Pastrana apuntó que el PERTE no ha allanado el camino para alcanzar los retos del sector, pero sí ha impulsado una aceleración en los procesos y reflexiones necesarias, forzando al sector público a adaptarse a los plazos y desafíos. Respecto a la modificación tarifaria, García Pastrana explicó que la clave ha sido una buena coordinación técnico-política, basada en una comunicación clara y planificación detallada. Se realizó un análisis profundo de las necesidades del servicio, acompañado de un plan financiero para garantizar el pago y la mejora en la prestación de servicios. Los incrementos tarifarios, moderados tras catorce años sin cambios, han sido bien aceptados gracias a esta transparencia en la gestión.
En su turno de palabra, Manuel Romero compartió cómo Sevilla ha enfrentado la peor sequía de los últimos años, incluso más intensa que la de los noventa, sin imponer restricciones gracias a la planificación, la infraestructura del embalse Melonares y la mayor concienciación de la población. También abordó el proceso de actualización de tarifas en EMASESA, que subirán un 14%. En este sentido, destacó que, desde 2005, la facturación por habitante les ha permitido gestionar de manera más eficiente la demanda de agua.
Por último, Josep Xavier Pujol destacó que, a pesar de la sequía que afecta a Cataluña, el consorcio no ha experimentado restricciones en el abastecimiento, ya que este ha estado protegido. Las restricciones han afectado principalmente a los usos agrarios. Además, explicó cómo la digitalización ha sido clave en la garantía de suministro, mejorando tanto la calidad del servicio como la gestión de infraestructuras. Pujol describió la digitalización como la «cumbre de la pirámide», que se apoya en una base sólida de infraestructuras físicas, datos, comunicaciones y, finalmente, la propia digitalización. Esta tecnología ha permitido implementar un gemelo digital, lo que facilita la anticipación y el monitoreo del estado de las tuberías, ofreciendo una mayor tranquilidad a largo plazo.
La mesa redonda puso de manifiesto los desafíos y soluciones a los que se enfrentan las cuencas centrales y meridionales en la gestión del agua, con un enfoque especial en la digitalización, la planificación tarifaria y la resiliencia frente a la sequía. La intervención de José María Infante Olarte destacó cómo la digitalización, a través de proyectos como los gemelos digitales, mejora la gobernanza del agua y la sostenibilidad. Antonio García Pastrana subrayó la importancia de la coordinación y la transparencia en los ajustes tarifarios, mientras que Manuel Romero mostró cómo una adecuada planificación y gestión de infraestructuras, como el embalse de Melonares, ha permitido a Sevilla enfrentar la sequía sin restricciones. Finalmente, Josep Xavier Pujol remarcó el papel fundamental de la digitalización para garantizar el suministro en Tarragona, asegurando una gestión eficiente de las infraestructuras. Así, las experiencias compartidas evidencian la necesidad de soluciones integradas y una gestión adaptativa ante los retos actuales del sector hídrico.
Finalmente, Arantxa Atutxa, diputada foral del Departamento de Medio Natural y Agricultura de la DFB, fue la encargada de clausurar la jornada. En su intervención hizo hincapié en el compromiso de la Diputación Foral de Vizcaya con la gestión sostenible del agua y la protección del medio natural en un territorio diverso que combina áreas urbanas y rurales con una orografía compleja. Destacó el reto que supone garantizar un suministro de agua de calidad y en cantidad suficiente para todos los municipios y toda la ciudadanía, asegurando un servicio igualitario. Finalmente, recalcó el papel esencial de la digitalización y la innovación de cara al futuro; en este sentido, la diputación apuesta por iniciativas clave que nos acerquen a un modelo de gestión sostenible, eficiente y respetuoso con el entorno natural.