En los últimos meses el Canal Maule Norte ha sufrido un grave problema por arrastre de sedimentos de piedra pómez (Pumita) originados en el río Blanquillo. Al entrar estos arrastres al canal provocan continuos problemas de embancamiento y obstrucciones de algunas infraestructuras. Parte de la solución para mitigar la afección pasa por eliminar esos sedimentos en la parte inicial del canal aprovechando las estructuras de desarenado o desripiado que conectan el canal a desagües a través de compuertas de fondo.
Una de esas compuertas ha sido automatizada por Riegosalz para que los gestores del canal programen las operaciones de limpieza de forma telecontrolada y supervisen a tiempo real el estado de la instalación. La actuación ha supuesto la motorización de la compuerta existente y la instalación del sistema de telecontrol, automatización y alimentación solar fotovoltaica. El equipo de control se ha incorporado al Puesto Central de Control de la Asociación Canal Maule Norte con el que ya se operan 22 puntos de control de compuertas y monitoreo de caudales.