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La desaladora de Binningup (Australia) de Sacyr Agua cumple 10 años de eficiencia y sostenibilidad

La Southern Seawater Desalination Plant (SSDP) en Binningup (Australia) es un ejemplo de eficiencia y sostenibilidad. La planta, ubicada en las dunas de las pequeñas ciudades costeras de Binningup y Myalup, aproximadamente a 130 km al sur de Perth, fue diseñada inicialmente para una capacidad de producción de agua desalada de 153.000 m3/día. Sin embargo, una vez finalizada la puesta en marcha de la primera fase, la empresa pública de agua del gobierno del Oeste de Australia y propietaria de la planta, Water Corporation of Western Australia, solicitó la ampliación al doble de su capacidad, con lo que la producción actual es de 306.000 m3/día, un porcentaje significativo del agua potable de Australia Occidental.

La desaladora fue diseñada, construida y es operada por la alianza (Alliance) formada por Water Corporation junto con Sacyr Agua, Técnicas Reunidas, AG Lucas y Worley Parsons, aunque en la actualidad Sacyr Agua tiene el control de la operación y mantenimiento, tras la compra de Técnicas Reunidas Australia.

La primera etapa de la desaladora tuvo un coste de unos 750 millones de euros y finalizó en 2011. La ampliación de la desaladora para duplicar su capacidad fue adjudicada al mismo consorcio y entró en funcionamiento en 2013, con una inversión de 350 millones de euros. En conjunto, el proyecto alcanzó los 1.100 millones de euros.

Un ejemplo de sostenibilidad

La desaladora fue diseñada con numerosos avances relacionados con la sostenibilidad, ya que, aparte de tener uno de los consumos energéticos más bajos del mundo, con valores inferiores a 2,2 Kw-h/m3, se alimenta de fuentes sostenibles de energía. Water Corporation adquirió el compromiso de alimentar a la planta mediante energías renovables y esta se abastece de un sistema de producción de energía eólica de 80 MW con 40 turbinas y del parque solar más grande de Australia, de 80 ha, con 10 MW instalados, ampliable a 40 MW. Aunque estos sistemas no están directamente acoplados a la planta, sino a la red, puede decirse que la planta se alimenta completamente de energías renovables.

Durante la construcción, el consorcio asumió un absoluto compromiso y respeto con las especies locales con la contratación de un biólogo marino para la observación de las actividades de construcción y su potencial afección sobre mamíferos marinos, la construcción de un corredor natural a lo largo de la parcela para no interferir con la zona de paso de los Possums, entre otras medidas.

Las obras marinas (captación y vertido de salmuera) fueron no invasivas y se realizaron por microtunelado con el fin de no afectar al sistema de dunas protegido. Además, se construyó una berma de doce metros de altura para la reducción del impacto visual de la desaladora, junto con un diseño arquitectónico y paisajístico acorde con el entorno.

El proyecto de diseño, construcción y operación de Southern Seawater Desalination Plant (SSDP) alcanzó los 1.100 millones de euros

Para reducir el impacto en la fauna y flora local, la planta se construyó en los restos de una antigua cantera de piedra caliza. Al completar la fase de construcción de la planta, se fomentó la revegetación de plantas nativas. Esta revegetación ha sido un éxito con el descubrimiento de una nueva especie de acacia, la Acacia sp. Binningup, en agosto de 2015, que se confirmó como especie en septiembre de 2017.

Otro de los compromisos del proyecto fue la política de “cero químicos” en el pretratamiento, que ha permitido que los rechazos procedentes del lavado de la ultrafiltración puedan ser enviados de vuelta al mar junto con la salmuera sin tratamiento previo, tal como prevé la legislación australiana.

  • Para mejorar la funcionalidad de la planta, se diseñó y construyó una conexión cruzada entre los tanques de agua filtrada y los sistemas de remineralización

Mejoras innovadoras y sostenibles

Desde la construcción de la planta, como durante la operación y mantenimiento, se han implantado muchas mejoras basadas en la innovación y la sostenibilidad, no solo en la planta en sí, sino también con la introducción de la digitalización de los procesos y con la realización de cambios en los procedimientos para fomentar la seguridad continua de los empleados y la sostenibilidad de las operaciones en la planta.

Entre estas mejoras, Tom Ransome, gerente de Operaciones de la desaladora, destaca: «Los buenos resultados obtenidos con la modificación del bastidor 14, unidos al carácter innovador y a la buena comunicación entre la Alianza, nos llevó a realizar en 2018 una actualización completa del sistema de ósmosis inversa, aumentado la superficie total de filtración un 9,6 %, lo que permitió poder aumentar la capacidad total de la planta a más de 100 GL de agua potable al año (o 100 millones de m3)».

Además, para mejorar la funcionalidad de la planta, se diseñó y construyó una conexión cruzada entre los tanques de agua filtrada y los sistemas de remineralización para permitir que estos pudieran operar entre ambas etapas. Con el fin de mejorar el rendimiento de la planta, también se han realizado varias modificaciones y mejoras en el procedimiento de limpieza in situ o CIP (del inglés Cleaning In Place). Entre ellos destacan las mejoras realizadas en las limpiezas de las membranas de ultrafiltración, con un nuevo procedimiento previamente validado a escala de laboratorio. Esta innovación se ha combinado con el testeo de otras técnicas o procedimientos de limpieza, incluyendo órdenes de limpieza dobles, el uso de DBNPA después de la limpieza por ósmosis inversa, la limpieza de filtros de cartucho y su enjuague a contracorriente y/o con salmuera, así como los retrolavados de la ultrafiltración.

La desaladora fue diseñada con numerosos avances relacionados con la sostenibilidad: tiene uno de los consumos energéticos más bajos del mundo

El gerente de mantenimiento de la SSDP, Paul Oosthuizen, destaca que «La innovación no solo se ha aplicado a los procesos de la planta, sino que también se ha fomentado la digitalización, con el diseño e introducción de una plataforma específica sin papel que se vincula con los sistemas de adquisición, permisos y almacenamiento de datos que se utilizan en la planta. Además, se están utilizando drones para la inspección y detección de fugas en los equipos de la planta, junto con un plan de formación para aumentar el personal autorizado para operar estos drones en las inspecciones».

Thea Rintoul, especialista en química de procesos de la desaladora, ha estado trabajando en algunas investigaciones preliminares sobre inteligencia artificial: «En línea con la plataforma virtual, la automatización del sistema de control proporciona otra capa de seguridad a través de bloqueos, alarmas vinculadas a equipos específicos y PID's. A través de la colaboración con proveedores externos, la planta también ha introducido una plataforma de visualización XHQ que proporciona datos de planta en tiempo real, brindando la oportunidad de optimizar la operación de la planta en tiempo real».

Impacto social positivo

El proyecto ha tenido un alto impacto social positivo, ya que, tras las reticencias iniciales de los habitantes locales, se realizaron actividades de difusión, integración y colaboración con las asociaciones vecinales, para que se implicaran con el proyecto; para ello también se tuvo en cuenta la herencia cultural de la zona, con legado aborigen. Además de los numerosos puestos de empleo generados, la producción y suministro de agua desalada ha impactado en la riqueza de la zona.

«La planta opera a niveles óptimos con el fomento de la innovación, la comunicación abierta entre todos los participantes y un enfoque en la seguridad y la sostenibilidad», señala el gerente de la alianza, Bradd Hamersley. «Estamos muy orgullosos de cómo se ha construido, mantenido y operado la instalación», agrega.

  • En la construcción, operación y mantenimiento de la planta, se han implantado muchas mejoras basadas en la innovación y la sostenibilidad

Premios

La planta ha recibido numerosos galardones gracias al proyecto y sus innovaciones, entre los que destacan: 2012 ‘Desalination Plant of the Year’ en los Global Water Awards que entrega Global Water Intelligence, que reconocen a los proyectos que han realizado los avances más significativos en términos de innovación y en el cumplimiento de objetivos en circunstancias especialmente complejas en el campo de la ingeniería del agua a nivel mundial; la consultora y auditora KPMG seleccionó la planta entre los cien proyectos de infraestructuras más innovadores a nivel global dentro del informe ‘Infrastructure 100: World Markets Report 2014’; en 2012 Australian Institute of Architects’ Architectural Award y Master Builders Excellence Award; y en 2011 ‘Engineering Excellence Awards’ Overall Winner por el Australian Institute of Project Management.

Para mejorar la funcionalidad de la planta, se diseñó y construyó una conexión cruzada entre los tanques de agua filtrada y los sistemas de remineralización

  • Las obras marinas fueron no invasivas y se realizaron por microtunelado con el fin de no afectar al sistema de dunas protegido

Línea de tratamiento

La planta cuenta con la siguiente línea de tratamiento: captación de agua de mar, por medio de dos torretas sumergidas a 12 m de profundidad, construidas en hormigón y de 8 m de diámetro; dos tuberías de captación de 2,4 m de diámetro en PEAD colocadas mediante microtunelado (400 m tramo terrestre y 460 m tramo marino); dos tamices automáticos de 3 mm de paso; estación de bombeo con 8+2 bombas verticales con variador de frecuencia; dieciséis filtros de protección autolimpiables con 200 micras de paso; un sistema de pretratamiento por Ultrafiltración presurizada con membranas de PVDF de 0,04 micras de poro nominal y un 95 % de conversión; sistemas de dosificación química y sistemas auxiliares (CIPs, planta de tratamiento de efluentes); filtros de cartuchos de protección; un sistema de bombeo para cada tren: bomba booster con variador de frecuencia, bombeo de alta presión, recuperadores de energía ERI (veinte por tren) y bombas booster para la recuperación de energía con variador de frecuencia; bastidores de ósmosis inversa con tubos de siete membranas y diseño en dos pasos con tanques intermedios (dieciséis bastidores en el primer paso con una conversión de diseño del 45 % y ocho bastidores en el segundo paso con una conversión de diseño del 90 %); un sistema de dilución por difusores y descarga de salmuera en dos tuberías de PEAD de 2,2 m de diámetro construidas por microtunelado (400 m tramo terrestre y 460 m tramo marino), y una línea de potabilización (remineralización con cal y CO₂, dosificación de cloro y flúor).