El pasado jueves 30 de junio se celebró la cuarta jornada de Nuevo Regadío Forum 2022. Centrada en “Del campo a la mesa”, una primera sesión versó sobre los cultivos. Siempre en busca de la sostenibilidad y la rentabilidad, los actores del regadío no han dejado de experimentar e innovar a la hora de apostar por diferentes productos.
Así, en esta sesión se pudo conocer de primera mano la realidad de diferentes cultivos que viven un buen momento en términos de demanda y expectativas de crecimiento futuro. En primer lugar intervino Carlos Garrido, director del Centro Nacional de Tecnología de Regadíos (CENTER). Por su parte, Amelia Gómez-Carreño, de la Dirección Comercial de Saleplas, habló de la agricultura sostenible, señalando que el 74% del territorio español es susceptible de desertificación por el cambio climático: “Es impensable una agricultura sin regadío, pero que tengamos que producir no quiere decir que no lo hagamos de forma sostenible, creemos que es posible equilibrar la balanza”.
Además, comentó que el regadío se tiene que sustentar en tres pilares básicos: regadío tecnificado, sostenible y eficiente, y que las demandas actuales de cantidad y calidad de producto requieren un control sobre el cultivo: “Si se hace una buena gestión de la explotación vamos a obtener unos valores de eficiencia del uso del agua superiores, vamos a poder producir más con menos agua”. En este sentido, apuntó que “el regadío, en cualquiera de sus formas, es un arma de lucha contra la desertificación”.
Durante su intervención, Amelia Gómez-Carreño habló del cultivo del olivar en España: “España es el país con mayor superficie de olivar del mundo: 2,8 millones de hectáreas, de las que un tercio aún se cultivan en secano”. A modo de conclusión, señaló que “Es posible lograr un equilibrio entre producción, calidad y cantidad frente a la sostenibilidad que nos están pidiendo, y el cultivo intensivo es una de las soluciones más desarrolladas para ello”.