Las últimas inundaciones y deslizamientos de tierras provocados por las intensas lluvias registradas en Sri Lanka han dejado al menos 39 personas muertas y más de un millón de desplazados en las últimas dos semanas, según datos facilitados por el Centro de Gestión de Desastres.
Al menos 20 personas han resultado heridas y otras dos permanecen desaparecidas como consecuencia de las lluvias torrenciales, que han afectado principalmente al centro de Sri Lanka. Miles de hectáreas de cultivos, en su mayoría de arroz, han quedado destruidas en la zona agrícula de las provincias del este y del norte central del país.
El pasado mes de octubre, un deslizamiento de tierras en una plantación de té causada por unas intensas lluvias mató a al menos 16 personas y dejó más de 100 desaparecidos. De octubre a enero, los monzones traen lluvias más fuertes que las que se registran entre marzo y mayo aunque no suelen causar demasiados deslizamientos de tierras.