La secretaria general del PSOE de Sevilla, Verónica Pérez, y el congresista Antonio Pradas, ha mantenido una reunión con comunidades de regantes de Sevilla para valorar las nuevas tarifas eléctricas que suponen una multiplicación de la factura por 2.15 puntos como media para el sector. Según Verónica Pérez, “un duro golpe para todos los sevillanos y andaluces ante una subida abusiva e injusta para la actividad que desarrollan y que se suma a otros agravios comparativos. Ya hemos aprobado una iniciativa en el Parlamento, en los ayuntamientos y la vamos a llevar al Congreso solicitando unos módulos de tarificación eléctrica y una contratación en los periodos que se utiliza y no todo el año, ya que ese uso se limita a cinco meses al año. Es un sector que el Gobierno está maltratando, y una situación que se suma al injusto reparto delas PAC que dice que nuestra comunidad es la que menos fondos va a recibir a pesar de que desde Europa llegan más recursos”.
Las nuevas tarifas eléctricas suponen una multiplicación de la factura por 2.15 puntos como media para el sector
Como asegura el congresista Antonio Pradas, esta modificación de la factura implica “una subida del 115% en el fijo de la factura por electricidad, después de una inversión de 6000 millones en la modernización de los regadíos y su electrificación y colocación de contadores en años precedentes. Ahora que se han introducido estos sistemas de riego electrificado, se suben los costes a un sector estratégico. Estamos hablando de 250.000 hectáreas de regadío, un 70% de la producción agrícola de la provincia de Sevilla. Aquí van a sufrir los agricultores cómo se sube un 115% en la cuota de potencia independientemente de que no se utilicen los equipos porque, como ha sucedido en las semanas pasadas, esté lloviendo y no resulte necesario”.
Una subida que supone un nuevo golpe al sector y que se suma “a los gastos de energía, de suministro de carburante, y sobre todo, a los impuestos y al IVA. Todo ello en un sector fundamental para Andalucía y Sevilla que hacen inviables muchas explotaciones. Por eso proponemos adaptar el recibo a la producción agrícola, que se pague lo que se consuma con contratos de estacionalidad que puedan darse de alta y baja. Que se diseñen uno o varios contratos, por temporada o de segregación, en función de la época del año. Y también proponemos que haya un IVA reducido. Que se reduzca, pues a pesar de que el gobierno argumenta la imposibilidad jurídica en el marco europeo, en Italia ya se aplican esas tarifas especiales que, por qué no, también se pueden traer a Andalucía”.