El pleno del Área Metropolitana de Barcelona ha aprobado este martes no cortar el suministro de agua a ningún usuario con problemas para pagar el recibo, puesto que es un bien básico e imprescindible.
También se ha aprobado un protocolo, que considerará que, si un ciudadano declara a la compañía subministradora o a los servicios sociales de su Ayuntamiento que no puede hacer frente a las facturas, o simplemente deja de pagar, se investigará si puede beneficiarse de las tarifas sociales metropolitanas, que se aprobaron en otoño.
En caso afirmativo, las facturas pasarían a ser más baratas para el usuario, y de la misma manera, también hay la posibilidad de negociar aplazamientos o pagos mensuales como la compañía, y el acceso a uno de sus fondos sociales.
Además, siempre que el caso sea valorado por los servicios sociales municipales, un ayuntamiento puede decidir si se hace cargo de la deuda del usuario.
Durante todo el proceso de valoración, el Área Metropolitana no dará autorización para cortar el suministro y no se hará si se demuestra la situación de vulnerabilidad del ciudadano.
El pleno también ha aprobado un programa de movilidad sostenible para promover el uso de la bicicleta, que incluirá una mejora de las conexiones con carril bici entre los municipios metropolitanos.