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Monitorización inteligente de presión: TFS Grupo Amper optimiza la detección de fugas y fraudes

Monitorización inteligente de presión: TFS Grupo Amper optimiza la detección de fugas y fraudes

El Spain Smart Water Summit fue el escenario donde Héctor Gil San José, director comercial de TFS Grupo Amper, presentó la innovación en manómetros autónomos conectados. Durante su intervención, explicó cómo la digitalización de la monitorización de presión en redes de agua permite detectar fugas y fraudes con mayor rapidez, optimizar la eficiencia operativa y reducir la huella de carbono.

Gil comenzó destacando la trayectoria de TFS en el desarrollo de soluciones tecnológicas para la gestión del agua. En menos de tres años, su producto estrella, Hercules, se había consolidado como una referencia en la digitalización de redes de abastecimiento de agua y gas. La compañía ha sido pionera en la fabricación de manómetros inteligentes, una tecnología que ha permitido a muchas gestoras reducir pérdidas y mejorar el control de la red.

El reto principal que abordó en su presentación fue la necesidad de contar con herramientas de medición más eficientes para evitar el desperdicio de agua y optimizar el mantenimiento de las infraestructuras. Según estudios del Instituto Nacional de Estadística y grandes operadoras del sector, tres problemas destacan en la gestión del agua: las fugas en la red, los fraudes en el consumo y la huella de carbono generada por el ciclo del agua. La clave para abordar estos desafíos radica en la detección temprana y la capacidad de reacción ante variaciones anómalas de presión.

A diferencia de otros sistemas de medición, los manómetros Hercules de TFS permiten configurar parámetros a distancia, sin necesidad de intervención física. Se trata de dispositivos mecánicos basados en la tecnología de tubo Bourdon, que no requieren transductores ni contactos eléctricos. Su gran ventaja es la posibilidad de enviar datos en tiempo real y generar alarmas automáticas cuando se superan los umbrales establecidos. De este modo, si la presión en una zona desciende por debajo del límite programado o aumenta más de lo esperado, el sistema emite una alerta inmediata sin necesidad de esperar a la comunicación rutinaria.

Gil explicó que, en muchas gestoras, los despliegues iniciales de sistemas de medición generan una sobrecarga de información, lo que dificulta la interpretación de los datos. En TFS han desarrollado una solución que equilibra la frecuencia de comunicación con la durabilidad del equipo. Dependiendo del uso, los manómetros pueden tener una autonomía de entre tres y diez años, lo que garantiza su eficiencia operativa. En casos donde se requiere una comunicación diaria, la batería dura entre ocho y diez años. Si la frecuencia aumenta a intervalos de una hora, la duración se reduce a unos cuatro años, aunque siempre con margen suficiente para una operatividad óptima.

La combinación de sensores activos y comunicación en tiempo real permite reducir hasta en un 80% el gasto de agua y la huella de carbono

Otro punto clave de la presentación fue la versatilidad de los manómetros en términos de conectividad. Gil explicó que funcionan con tecnología NB-IoT y LoRaWAN, dos sistemas de comunicación diseñados para redes de bajo consumo y largo alcance. La primera opción permite conectar los dispositivos a las redes de operadoras como Vodafone, Orange o Telefónica, garantizando una cobertura amplia con un coste de servicio recurrente. La segunda opción ofrece la posibilidad de que cada gestora despliegue su propia red, eliminando costes recurrentes, aunque con la necesidad de realizar una inversión inicial en infraestructura.

Uno de los aspectos más relevantes de la ponencia fue la relación entre la digitalización de la presión y la detección de fugas. Según las estimaciones, en España se tarda en promedio siete días en localizar una fuga. Con una red bien sectorizada y equipada con manómetros como los de TFS, este tiempo puede reducirse a menos de 24 horas. La capacidad de segmentar la red en tramos más pequeños permite reaccionar con mayor rapidez y evitar desperdicios innecesarios de agua.

Para ilustrar la aplicabilidad de la tecnología, Gil presentó un caso de uso en depósitos de agua. Explicó cómo, al instalar un manómetro en la base de un depósito de diez metros de altura, es posible medir la columna de agua con precisión sin necesidad de sensores adicionales. Configurando umbrales de presión adecuados, se puede monitorizar el nivel del depósito y recibir alertas ante descensos anómalos. Esta solución ofrece una alternativa sencilla y de bajo coste para mejorar la supervisión del suministro de agua.

Además del impacto en la eficiencia operativa, el sistema también contribuye a la sostenibilidad ambiental. Gil destacó que la combinación de sensores activos y comunicación en tiempo real permite reducir hasta en un 80% el gasto de agua y la huella de carbono asociada. La reducción de desplazamientos para inspecciones manuales disminuye las emisiones de CO₂, y la optimización del mantenimiento evita pérdidas innecesarias de recursos.

Para cerrar su intervención, Gil subrayó que la clave para una gestión eficiente del agua reside en la combinación de monitorización continua, sectorización y control de presión en tiempo real. La capacidad de reaccionar ante variaciones inesperadas no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también permite reducir costes y optimizar el uso de los recursos disponibles.

"El verdadero valor de nuestra tecnología no solo está en medir la presión, sino en ofrecer información procesable que permita tomar decisiones más rápidas y eficientes", concluyó.

Su presentación dejó claro que la combinación de sensórica avanzada, integración digital y análisis de datos es el camino hacia una gestión hídrica más inteligente, sostenible y eficiente.

Sobre Spain Smart Water Summit

Spain Smart Water Summit 2024, celebrado en el Meliá Avenida América de Madrid, se posicionó como el principal foro de innovación hídrica, reuniendo a 438 delegados y 119 ponentes en 40 sesiones técnicas. Durante el evento, se abordaron retos globales en la gestión del agua, explorando soluciones innovadoras y promoviendo la sostenibilidad.

El programa incluyó presentaciones técnicas, experiencias interactivas digitales y herramientas de networking en tiempo real, facilitadas por una aplicación exclusiva que registró más de 18,500 accesos a sesiones. Este enfoque permitió a expertos y líderes del sector compartir conocimientos y debatir sobre el futuro de la gestión hídrica global.