El Gobierno Bolivariano aprobó 16 mil 700 millones de bolívares (2.600 millones de dólares) para el Plan Nacional del Agua, un proyecto estructural para darle soluciones a los problemas relaciones con el líquido vital y brindarle a todos los venezolanos agua potable.
Así lo informó el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, durante la transmisión del programa En contacto con Maduro, en su cuarta emisión, realizada desde Punto Fijo, en la península de Paraguaná, del estado Falcón.
El Plan Nacional del Agua surgió de la crítica justa del pueblo que lucha y que cree en su Patria, la cual fue escuchada por el Presidente y el Ejecutivo nacional durante el Gobierno de la Eficiencia en la Calle, acotó el mandatario nacional.
Por su parte, el ministro del Poder Popular para el Ambiente, Miguel Rodríguez, informó que de ese plan “se están ejecutando a nivel nacional 383 obras; es decir, todos los primeros recursos están en ejecución”.
De esos proyectos 132 están siendo elaborados por el Poder Popular y las Mesas Técnicas de Agua (MTA), añadió el titular de la cartera del Ambiente.
En el ámbito del estado Falcón, el ministro Rodríguez indicó que el jueves pasado se entregaron 16 millones de bolívares a siete Mesas Técnicas de Agua, día en que también se conformó el Consejo Estadal del Agua.
También para el estado Falcón se están ejecutando 32 obras, conjuntamente con Pdvsa, con una inversión de 243 millones 750 mil bolívares, porque es uno de los estados con mayores problemas con el agua. “No solo hemos reconocido el problema sino que estamos al frente del problema en todas las instancias”, puntualizó el ministro Rodríguez.
También comentó que se conforma el Consejo Estadal del Agua en los estados Yaracuy y Barinas, con la finalidad de hablar en consonancia en cuanto a las obras prioritarias, su jerarquización y la incorporación del pueblo para la ejecución de las obras.
Agradeció el apoyo brindado por el Movimiento Ecologista de Venezuela, cuyos integrantes plantaron más de 500 árboles para reponer las plantas taladas por los guarimberos fascistas.