CCOO considera que la privatización del Canal de Isabel II, incluida en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos autonómicos, pone en riesgo la empresa pública e introduce un factor de desestabilización en el abastecimiento de agua y el fin de la planificación de las políticas de este bien básico que tan buenos resultados han obtenido en los últimos años.
Este sindicato considera que la Empresa Pública “Canal de Isabel II” es una demostración incuestionable de que la titularidad y la gestión públicas en servicios esenciales son más adecuadas y eficientes que las privadas.
Considera también que los Presupuestos demuestran año a año la capacidad de esta Empresa Pública para hacer frente a las nuevas inversiones y "dejan sin argumentos al Gobierno regional del PP, poniendo en solfa toda su política de privatizaciones de los servicios públicos esenciales".
La "solvencia y eficiencia" del Canal la demuestran, a juicio del secretario de Política Institucional de CCOO Madrid, Jaime Cedrún, los 60 millones de euros de beneficios previstos para 2008, los 2.637 millones de patrimonio neto y los 809 millones de presupuesto para 2009. Por tanto, a su juicio, la privatización de esta empresa pública sólo obedece a "un planteamiento ideológico" y a "una operación de negocio" consistente en "transferir a unos pocos lo que es de todos".
Cedrún ha lamentado por último que la presidenta regional se empeñe en "desestabilizar" a una empresa que tiene 150 años de existencia y que es "un ejemplo" y en aplicar unas políticas liberalizadoras cuyo "fracaso" ha quedado demostrado.